En el artículo, de mediados de enero, advertí la posibilidad de nuevos ajustes y medidas por la caída del precio del petróleo por debajo del presupuestado ($ 35 el barril) y, según expertos, el precio podría llegar a $ 20. Ya se ha anunciado un ajuste al Presupuesto del Estado por $ 400 millones. Toca administrar el tiempo de vacas flacas.
Como resultado de la caída del petróleo, la iliquidez del sector público y menor demanda agregada, el crecimiento será menor al 0.1% proyectado por el FMI y se perfila un decrecimiento. En dicho artículo, señalamos que habría un nuevo recorte en proyectos de inversión en infraestructura. El Gerente del BCE declaró que se realizarán recortes en la inversión y gasto permanente.
Con menor nivel de crecimiento caen los ingresos tributarios. Diario Expreso ha informado que en enero de este año las recaudaciones por impuestos cayeron en relación al mismo mes del año pasado. Estos forman los ingresos permanentes que financian gastos permanentes. Por ello, al caer los tributos la realidad obliga a un recorte de estos, como ha dicho el gerente. ¿Qué rubros se disminuirán? Se ha mencionado tijeretazo a educación de posgrado, a los GAD; también habría cancelación de contratados, proyectos no prioritarios, etc.
En dicho artículo dije que, incluyendo el pago a OXY, el déficit fiscal sería 3.5% del PIB; ahora, con este escenario, se este bordearía el 4%, lo que explica la decisión de recortar no solo el gasto de capital sino además el gasto corriente. Agrava la situación el déficit de EP. Si no reducen estos, las necesidades de financiamiento aumentarían. Según el Ministro de Finanzas estas llegan a 8.500 millones. La lentitud de los desembolsos de crédito no permite pagar a proveedores o asignaciones a los GAD, entidades privadas (Solca), etc. El Ministro de Finanzas ha declarado que los atrasos suman $ 800 millones, que no incluyen la deuda con los GAD, Issfa e Isspol y a las cías. A petroleras deben $ 1.900 millones.
La caída de las exportaciones petroleras o no petroleras ha reducido la liquidez de la economía, por lo que la Junta Monetaria tomó medidas como exceptuar del pago del ISD cuando atraigan capitales o créditos mayor a un año, se eliminó el aumento al fondo de liquidez de las instituciones financieras, etc. aliviando la presión de liquidez sobre el sector privado productivo y financiero.
Del sector externo, señalé que aumentaría el déficit comercial, lo que llevaría a aumento de los aranceles, quizás antes de que se levanten las salvaguardias (Julio/2016), más cuotas de importación, prohibiciones y aplicación más estricta de normas de calidad. No se puede descartar el timbre cambiario que frenaría importaciones e incentivaría exportaciones.
Si siguen cayendo el precio del petróleo y los ingresos tributarios, se impone un fuerte ajuste. ¿Cuándo? En tiempos de vacas flacas, hay que priorizar el gasto público y también evaluar una reducción del tamaño del Estado, de entidades no prioritarias o ineficaces. La prioridad es defender el empleo, hay que tener recursos para ello. (O)
