Escribo este artículo previo a las elecciones parlamentarias del 26-J. Con Los resultados de estas en Diciembre, del año pasado, el Partido Popular (PP) perdió la mayoría legislativa, hubo reducción de votos del Partido Socialista (PSOE), Podemos (P, Izquierda) logra ser la tercera fuerza política y surge la nueva derecha con Ciudadanos (C’s). Sin embargo, el PP y PSOE no pudieron formar gobierno, lo cual generó una inestabilidad e ingobernabilidad. Estas nuevas elecciones podrían generar el rompimiento del bipartidismo y un nuevo gobierno sin la derecha.
El PP, tiene un escenario complicado. Si bien la economía se recuperó, la OCDE espera un crecimiento de 2.8%, en este año, pero caerá a 2.3% en 2017; el desempleo sigue alto, 21.4% en 2016, según la OIT. Hay 3.8 millones de parados y el desempleo juvenil es alto. El déficit fiscal en 2015 fue de 5% del PIB y la UE impondría multa por incumplir regla fiscal. Lo que afectará al PP en las elecciones será la corrupción. El caso Gurtel, Bankia, operación Púnica, comisiones por obras públicas en Valencia, etc. son tantos los casos de mal manejo de dinero público que la ética del PP está por los suelos. Con la austeridad se aplicó recortes en gastos sociales y aumentó la exclusión social. La imagen del PP se agrava por las escuchas del Ministro del Interior que fueron usadas contra los independentistas y P. El PP no pudo formar gobierno.
También el PSOE fracasó dos veces al tratar de formar gobierno, no logró votos para alcanzar la Presidencia. Para agravar la situación, Chaves y Griñán, expresidentes de la Junta de Andalucía, fueron procesados en la causa sobre los ERE que implica prevaricación y malversación de fondos públicos. Ambos abandonaron su curul, antes de que el partido les pida sus renuncias. Se trata de casos de corrupción, aunque en menor escala que la del PP.
P nació de las protestas de los indignados que acaba de celebrar los 5 años de esa gesta. Impulsa su campaña en las redes y TV. Utiliza un documental cuyo director Fernando León dice “Lo que me atrae … es la excepcionalidad del fenómeno: la irrupción de una formación política nueva que, sin presencia parlamentaria, le disputa el poder a los grandes partidos tradicionales … Como un barco que ya salió a navegar y todavía se construye”.
El otro partido que emergió en las elecciones de Diciembre fue C’s de derecha, afín al PP. Trata de infundir temor entre los votantes al decir que España se convertiría en otra Venezuela. En política toda arma, lícita o no, es utilizada. Las estimaciones electorales apuntan a que P-Izquierda Unida (UI) superaría al PSOE en las elecciones parlamentarias lo que le da la posibilidad que se constituya un gobierno progresista. El PP teme que se rompa el bipartidismo, por lo que ofrece reducir los impuestos y generar más puestos de trabajo, como su última carta.
Con esta tendencia, al parecer la izquierda tendrá buenos resultados, podría formar gobierno en alianza con el PSOE, pero si no hay acuerdo, con el reparto de escaños entre 4 partidos, habría inestabilidad. (O)
