La noticia sobre la operación Metástasis contra la presunta red de narcotráfico y corrupción en Ecuador es significativa y refleja los profundos desafíos que enfrenta el país. El hecho de que la investigación haya revelado vínculos entre el tráfico de drogas y algunos sectores clave del Estado, incluyendo funcionarios y exfuncionarios judiciales y policiales, sugiere una infiltración alarmante del crimen organizado en las instituciones gubernamentales.
Para entender la importancia de esta noticia en el contexto de un país afectado por el narcotráfico, es útil citar a expertos y autores que han abordado este tema. El economista y politólogo colombiano, Francisco Thoumi, ha escrito extensamente sobre el impacto del narcotráfico en las instituciones estatales. Este académico –que se ha desempeñado en importantes cargos en California State University, George Washington University, las Naciones Unidas, el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial–, destaca cómo la corrupción y la infiltración del narcotráfico en el gobierno debilitan la capacidad del Estado para funcionar eficazmente, erosionan la confianza pública y generan una cultura de impunidad.
Lo que dice el experto Thoumi se refleja tal cual en el caso de Ecuador. La fiscal Diana Salazar describe el caso Metástasis como una "clara radiografía de cómo el narcotráfico se ha tomado el Estado". Esto coincide con las preocupaciones planteadas por aún otros estudiosos, como el economista venezolano Moisés Naím, quien ha abordado también la relación entre el crimen organizado y la erosión institucional. El título de su columna en el diario El País de España, de noviembre de 2022, es “Cuando hacer lo obvio es imposible”. En este artículo, Naím enfatiza cómo la guerra contra las drogas ha creado una enorme y muy bien financiada burocracia que ha aprendido a neutralizar los esfuerzos que buscan encontrar alternativas más eficaces y humanas de atacar este problema.
Hay muchas más investigaciones que deberíamos revisar sobre el tema. Un análisis que hacen dos investigadores es el de Jerjes Aguirre Ochoa y Mario Gómez en su artículo “Debilidad institucional y experiencia anticrimen en México” en la Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad del 2021. En este, analizan la relación entre la corrupción política y el narcotráfico en México, a partir del caso del estado de Michoacán. Los autores concluyen que, y cito “pese al recrudecimiento de la violencia, el Estado mexicano ha hecho poco por atender sistemáticamente sus causas estructurales. No se ha mejorado el estado de derecho, ni se han fortalecido las instituciones autónomas del Estado. Los poderes legislativos, en sus niveles locales y federales, continúan experimentando problemas de legitimidad y transparencia en sus acciones.”
La experiencia de otros países con similares problemas, nos invita a estudiar el fenómeno. Por otro lado, la reacción positiva de los ciudadanos a la noticia sobre la operación “Metástasis” puede entenderse desde la perspectiva de un deseo compartido de erradicar la corrupción y fortalecer las instituciones del país. Como estamos constatando, la corrupción, a menudo alimentada por el narcotráfico, socava la confianza en cualquier gobierno y obstaculiza el desarrollo sostenible. La detención de funcionarios clave y la exposición de la red criminal podemos percibirlas como pasos cruciales hacia la construcción de un país más limpio y libre de la influencia perniciosa del narcotráfico.
La noticia no solo revela la gravedad de la situación, sino que también explica la inestabilidad en la que vivimos, la fiereza con la que las fuerzas políticas se atacan entre sí y el resultado que obtienen paralizando del país y la creando obstáculos para el sano desenvolvimiento de las labores ejecutivas, legislativas y judiciales. Detrás de todo ello está el mundo obscuro del crimen organizado. Por dura que sea la noticia, nos sitúa a los ciudadanos en la necesidad urgente de abordar la corrupción, castigarla duramente y encontrar formas de fortalecer las instituciones para garantizar un futuro más seguro y próspero para el Ecuador.
