Los empresarios conocen que un nuevo proyecto de inversión para expandir la producción (compra de maquinaria), requiere financiamiento e implica, en el corto plazo, un flujo de caja negativo (más egresos que ingresos) o pérdidas en los primeros años, pero en el mediano y largo plazo genera ingresos para pago de las cuotas del crédito y más utilidades, capital y reservas que fortalecen la solidez y valor de la empresa, pero también genera más empleo y redistribuye el ingreso.
Cuando un país invierte en infraestructura pasa algo parecido. En el caso del Ecuador, la construcción de megaobras de infraestructura física: hidroeléctricas, refinería de petróleo, obras de riego, etc., implica aumento de la inversión pública que requiere financiamiento. Este gasto de capital y el corriente explica el déficit fiscal de este año que llega a 5.900 millones de dólares, que ha generado problemas de liquidez pública, la eliminación y recorte de ciertos gastos, etc. Aunque este es manejable, obliga al Gobierno a buscar financiamiento de fuentes internas y del mercado internacional de capitales. No acudió a los organismos internacionales (BM y FMI) por los condicionamientos.
Regresar a dicho mercado internacional resultó más complicado para Ecuador, debido a su antecedente de default de parte de los bonos Global y después su recompra a cerca de un tercio de su valor. Esto, si bien significó ahorro para el país, cerró el mercado internacional de capital. Volver a este implica cumplir sus reglas. Una de ellas es, tener información económica validada por organismos financieros internacionales. Por ello se convalidó un convenio sobre esta materia con el FMI.
La búsqueda de financiamiento en este mercado llevó, primero, a un swap (derivado financiero) con Golman Sachs, banco de inversión, con el que, mediante un activo subyacente (oro), se obtuvieron recursos con la garantía del metal, que forma parte de la RILD. Como todo derivado, conlleva un riesgo.
Este fue el primer paso en la estrategia para obtener financiamiento permanente en el mercado financiero internacional. Recordemos que en 2015 hay que pagar desembolso de bonos Global.
El segundo paso fue la colocación en dicho mercado de 2.000 millones de dólares en bonos, a un plazo de 10 años, con un rendimiento de 7,9%, como lo ha anunciado el Ministerio de Finanzas. Esta tasa se relaciona con nuestro riesgo país de 535 puntos (marzo/14) y la tasa prime (3,25% semestral).
Si bien es una tasa alta, la prioridad son las megaobras, que no quieren ser paralizadas, las que permitirán, cuando se concluyan, realizar ajustes económicos. El acceso al financiamiento fue posible por el buen desempeño macroeconómico del país y su futuro crecimiento. Estas megaobras y la explotación petrolera en el Yasuní posibilitarán el cambio de la matriz productiva y potenciarán el crecimiento económico, generación de empleo, redistribución del ingreso, etc.
Se busca implementar un nuevo modelo económico basado en el desarrollo endógeno, pago de deuda social e impulso a la economía popular (microempresas) y solidaria (cooperativas) y reducción de pobreza.
