Es evidente que la totalidad de los candidatos a la Presidencia, de la oposición, unos más, otros menos, solo se dedican a pronosticar que, en caso de ser elegidos, van a destruir muchas de las realizaciones, iniciativas, proyectos que están en marcha, y de los que se intenta gestar.

En esa tarea se encuentran, particularmente, el candidato banquero y de los paraísos fiscales, la candidata del señor Nebot y el general, patrocinado por la ‘fanesca’ integrada por los desechos de la ID y los moribundos del MPD y Pachakutik.

No exhiben otra cosa que ofertas alucinógenas, como la de crear un millón de empleos, eliminar todos los impuestos, regalar la energía eléctrica a los pobres, entregar de nuevo la educación a las fuerzas retrógradas de la antigua UNE, eliminar las evaluaciones al magisterio y a los futuros universitarios; etc., etc..., sin explicar cómo van a hacer o de dónde van a sacar para semejante cantidad de imposibles.

No hay en los discursos electoreros novedades o iniciativas que no sean las de destruir todo lo que se haya podido avanzar en materia de desarrollo y de justicia social, durante los 10 años de Alianza PAIS. Ninguna oferta válida o creíble, sustentada en posibles financiamientos, asentadas sobre la realidad presente.

Para suerte de nuestro país, el verdadero y mayoritario pueblo de la clase media y de los sectores de bajos ingresos y víctimas de la inequidad, ya no están para comer cuentos de hadas ni para doblegarse ante sueños irrealizables.

Felizmente, para Ecuador y para su futuro, la mayor opción para vencer está en que los candidatos de Alianza PAIS que van a volver a triunfar en la primera vuelta y quedará hasta 2021, una nueva jornada para calificar lo que en los próximos cuatro años realice el gobierno de Lenín Moreno y Jorge Glas.

Pero resulta indispensable estar alertas sobre las maquinaciones que la derecha y el imperio gringo puedan desatar, para tratar de modificar y torcer el destino de este país. Ya vemos cómo la señora Ileana Ros-Lehtinen, gusana de cepa, republicana y amiga íntima de los Isaías, se convierte en abanderada de quienes pretendan liquidar la década ganada en Ecuador.

Estar alertas, para detectar las manipulaciones de los candidatos destructores, patrocinados desde el exterior por la derecha internacional, y denunciarlos para que el pueblo ecuatoriano se mantenga despierto y defienda las conquistas alcanzadas durante los 10 años del régimen actual.

Veamos lo que está pasando en Venezuela y recordemos lo acontecido por el gobierno chileno de Salvador Allende; sepamos que la derecha internacional y el imperio, que ahora tiene un gobernante más extremista, si cabe, estarán permanentemente a la caza de una oportunidad para intervenir en nuestro país.

Denunciemos, con todo vigor, cualquier intento que provenga de afuera o de adentro de nuestras fronteras, para menoscabar el proceso democrático de la contienda electoral que se avecina. Tengamos presente que la fuerza del enemigo es mucho más poderosa de lo que nos imaginamos.

Pero, recordemos que en nuestra historia hay lecciones ejemplares para saber defender con dignidad la soberanía, y enfrentar a cualquier enemigo que pretenda perjudicarnos. (O)