De los 8 binomios presidenciales, la mitad tiene mayores posibilidades: derecha, centro izquierda y el progresismo. Cada uno busca medir su fuerza electoral, escogieron a candidatos vicepresidenciales buscando el equilibrio regional e impulsar a sus asambleístas.
En la derecha tradicional, el fracaso de La Unidad por el retiro de Suma y Podemos, dejó sin piso a Avanza (AV) y Concertación (C), que ahora se ven obligados a ir separados a la elección. AV no apoyará a ningún candidato presidencial y lanzó sus candidatos propios a la Asamblea al igual que C. Es un serio revés y pasará factura a todos sus exintegrantes y al PSC-MdG en sus aspiraciones de lograr mayoría en la Asamblea. Estos inscribieron como binomio a Pozo, exministro de Finanzas de Lucio Gutiérrez, ligado a grupos económicos y financieros de la Sierra. Aún más, lograron el apoyo de R. Paz y R. Sevilla, para más respaldo de estos y consolidarse en esta región.
En la derecha ortodoxa, CREO inscribió como candidato vicepresidencial a Páez aprovechando su protagonismo. Inició su oferta de campaña basado en problemas (empleo, lucha contra corrupción) que, según encuestas, son los más acuciantes. La derecha irá dividida a la contienda electoral con la posibilidad de una alianza en la segunda vuelta.
Por el Acuerdo Nacional por el Cambio (ANC), P. Moncayo anunció que su candidata vicepresidencial será Monserratt Bustamante, docente universitaria guayaquileña que, si bien es desconocida políticamente, da equilibrio regional al binomio, pero que poco aporta a la intención del voto. Según una encuesta sigue su tendencia al alza en las preferencias electorales y busca conseguir adeptos en la Costa con el apoyo de Centro Democrático.
El progresismo confirmó a Lenín-Glas. Según encuestas, este binomio está liderando esas preferencias pero con tendencia a la baja. A pesar de tener liderazgo más ecuánime, los errores y no respetar el timing para el envío del proyecto de plusvalía (con otro giro) afecta la imagen de PAIS y pasará factura.
Dos hechos incidirán en la campaña. Uno, el dictamen favorable de la CC que aprobó la consulta popular para que no puedan ser candidatos quienes tengan capitales en paraísos fiscales. Si bien el resultado será aplicable en la siguiente elección, incide en la de 2017 por la presencia de banqueros y empresarios como candidatos. Más aún si Cauce Democrático (derecha) se opone a la consulta. Dos, el que por la derecha aparecen como candidato a la Asamblea un expresidente de las Cámaras y, por otro, según este diario, un presidente de una Cámara de Comercio asesora a CREO, con lo que se muestra su alineamiento y falta de neutralidad para organizar el debate presidencial. En este escenario, con tres candidatos presidenciales y dos vicepresidenciales serranos, con posibilidades, en esta región se dividirán los votos mientras que con un presidenciable y dos vicepresidenciales costeños también ocurriría lo mismo en la Costa, lo que favorecerá al progresismo. Así, habría segunda vuelta con binomios de AP y uno de la derecha o de ANC. (O)
