Los atletas ecuatorianos no logran alejarse de la sombra del andarín Jefferson Pérez, quien hasta la fecha es el único exponente local que ha conseguido medallas de campeonatos mundiales y juegos olímpicos de la categoría absoluta. Esa historia no cambió en el Mundial que se clausuró el domingo pasado en Londres, donde la delegación nacional tuvo como mejor actuación el puesto 13 de Paola Pérez en los 20 kilómetros de marcha femenina. 

También cabe destacar los sitios 18 que lograron Claudio Villanueva en los 50 kilómetros de marcha masculina y Bryan Pintado en la misma disciplina, pero en los 20 kilómetros, confirmando a la caminata olímpica como la modalidad de mejores resultados para Ecuador en el ámbito deportivo.

Estos logros no son comparables a los tres títulos planetarios consecutivos que cosechó Jefferson Pérez en París 2003, Helsinki 2005 y Osaka 2007 en los 20 kilómetros marcha, menos aún si el deportista no tiene todavía un sucesor y tampoco aparece un nuevo talento en otra variante del atletismo. 

Para Freddy Vivanco, exjefe técnico de la Federación Ecuatoriana de Atletismo (FEA), la apuesta por Chocho se agota cada vez más, pues la de Londres es la cuarta descalificación que sufre en un torneo universal, sumando las de Osaka 2007, Moscú 2013 y Pekín 2015.

Chocho es, potencialmente y por resultados, el atleta con mejor perfil, pero su inestabilidad técnica no le permite consolidarse. En ese sentido, Vivanco cree que la marcha en sí es un deporte, ciertamente, degenerado, porque las sanciones a los exponentes se sujetan a las interpretaciones de los árbitros.

“Las pruebas pedestres son una sucesión de saltos, las de marcha deberían ser una sucesión de pasos, pero se ve cómo muchos marchistas pierden el contacto de los pies con el piso; esto terminará el día en que se pongan chips en los zapatos de los competidores”.

Pese a todo, a criterio de Javier Cayambe, entrenador de marcha, esta disciplina se mantiene como la de mayor crecimiento y proyección en el país, ya que Ecuador es una de las potencias a nivel regional y con nuevos valores, como Glenda Morejón, David Hurtado, Jonathan Amores... es posible volver a al podio mundial sénior, siempre y cuando mantengan buenos resultados.

Homero Salazar, jefe técnico de la FEA, califica de positiva la participación ecuatoriana en dominios británicos, porque la mayoría de exponentes se mantuvo en la órbita de sus mejores marcas, incluso Byron Piedra (10.000 metros), Mauricio Arteaga (20 kilómetros marcha) y el equipo de la posta femenina de 4x100 metros registraron sus mejores tiempos de la temporada, mientras Claudio Villanueva (50 kilómetros marcha) y Bryan Pintado (20 kilómetros marcha) consiguieron sus mejores cronos personales.

Lamenta lo ocurrido con Chocho, que no logra corregir su biomecánica en la caminata olímpica. También considera que la velocista Ángela Tenorio atraviesa por un estancamiento, ya que desde el 22 de julio de 2015 no baja su mejor crono en los 100 metros lisos: 10 segundos con 99 centésimas (10s99c). Ese crono dejó de ser en Londres el récord sudamericano, ya que en el 6 de agosto, en las semifinales de la prueba, la brasileña Rosángela Santos hizo 10s91c.

Respecto a la posta de 4x100 metros, pese a que Manuel Bravo, presidente de la FEA, ratificó que los 43s94c que inscribió el equipo de posta femenil era el nuevo récord nacional, la matriz debe confirmar ese dato.

Freddy Vivanco comenta que en 2013, en La Habana (Cuba), Ecuador marcó 43s88c en una lid en la que compitió contra Cuba y Costa Rica. No obstante, Salazar cita que uno de los requisitos para ser récord nacional es que haya, al menos, 5 naciones en una competencia. La marca anterior dataría del 3 de mayo de 2015: 44s14c. (I)