En la reunión de parte de los líderes de la oposición se concretó un acuerdo electoral para la captación de la Asamblea Legislativa y con miras al Poder Ejecutivo.
Los movimientos políticos participantes, de distintas tendencias ideológicas, han marcado la cancha y se disponen además a buscar un candidato presidencial para captar el poder nacional.
En mi artículo de marzo/2014: “Resultados electorales alientan captación del poder político nacional” señalé que, con los resultados alcanzados por la oposición, al ganar alcaldías y prefecturas en ciudades grandes e intermedias, aumentaba su potencial electoral a 3 millones de votos. Sin embargo, el retiro del Alcalde de Cuenca y la pobre gestión municipal en Quito la debilita.
El acuerdo firmado tiene como objetivo la recuperación económica (normas para empleo, crecimiento, dolarización y reducción del tamaño del Estado), de la democracia (derogación de enmiendas constitucionales), derechos y libertades (individuales y colectivas). También se busca derogar las leyes de la reforma institucional, pero el fondo del acuerdo es la captación del poder nacional.
El primer paso es captar la Asamblea. Si bien se habla de unidad, en la derecha no participan todas sus tendencias. La derecha tradicional (PSC-MdG) es la que lidera el acuerdo y establece los objetivos; la derecha emergente (SUMA) si bien participa del acuerdo, dada la gestión del alcalde, se encuentra bastante debilitada, lo que hace perder potencial electoral a esta convergencia electoral; Junto Podemos apoya y coordina; la derecha más conservadora (CREO) no fue invitada ya que ha lanzado su candidato presidencial y, al parecer, va a marchar sola por lo menos hasta la primera vuelta electoral, así como Compromiso Ecuador. El PSP tampoco fue invitado. O sea que no está toda la derecha y no hay unidad completa. El líder de MdG fue muy claro, señalando que van a ir juntos pero no revueltos, que no es necesario una lista única para la legislatura. Refleja los intereses y la agenda de cada organización.
Precisamente buscando más votos, la convergencia electoral invitó a Avanza, cuyo líder asistió y firmó el acuerdo. Este partido, que tiene como membrete la tendencia “socialdemócrata”, quiere explotar haber ganado algunas alcaldías. Al formar parte de la convergencia electoral, muestra de qué lado está. Si bien su alianza en esta ha sido criticada por CREO, su interés es aumentar su participación en la Asamblea Nacional y acrecentar su poder.
La participación en el encuentro del Prefecto de Morona Santiago plantea el interrogante, ¿de qué lado están Pachakutik y la Conaie? Algunos de sus miembros señalan que no quieren pactar con la derecha, pero otros se reúnen con esta. Hay división en las organizaciones indígenas. Se aclara el panorama político. Los movimientos locales quieren captar el poder nacional. Está en juego el modelo político, económico y social de la revolución ciudadana. Parte de la derecha y sus aliados enfrentará al oficialismo; la incógnita son los movimientos de izquierda, que están divididos. (O)
