Hasta el 15 de abril, las empresas tienen plazo para pagar a los trabajadores las utilidades que se hayan generado en el 2022. Se trata de un monto económico que reciben anualmente los colaboradores, con base a las ganancias generadas por las empresas en el ejercicio fiscal anterior.

 “Las empresas deben repartir el 15% de las utilidades obtenidas; es decir que, en este 2023, pagarán acorde a lo registrado en el 2022”, explicó Francisco Nazati, jefe de Banca Personas de Banco ProCredit. Añade que este porcentaje se divide en dos: el 10% se reparte entre todos los trabajadores de la empresa, y el 5% restante entre aquellos que tengan cargas familiares (cónyuge e hijos).

¿Qué hacer si el empleador no cumple?

La fecha de pago y el monto están determinados en el Código del Trabajo, por lo que, en caso de que el empleador incumpla, el trabajador puede denunciarlo en el Ministerio de Trabajo.

Para hacerlo debe acudir personalmente al Ministerio de Trabajo, en Quito. Las personas que residan en otras provincias pueden acercarse a la Inspectoría de Trabajo. La denuncia es de carácter deservado.

Las sanciones por no pagar utilidades en el plazo establecido van de 3 a 20 salarios básicos unificados (SBU) por cada incumplimiento. Mientras que, si realizan una declaración falsa de utilidades, las empresas recibirán una multa de entre 10 y 20 SBU.