A pesar de que hay más canales en el espectro UHF que en el VHF, la programación en la mayoría de ellos es prácticamente nula. Hay grandes bloques de videos, muchas cápsulas informativas dispersas por ahí, infomerciales por toneladas, películas y series enlatadas, y uno que otro espacio de farándula y espectáculos, lo que el televidente llama entretenimiento, sin embargo en Canela Televisión, uno de los más nuevos en el UHF, hay programación variopinta y casi toda de factura propia. Solo los sábados por la noche hay un interesante bloque de contenidos con Videocontrol de la empresa independiente JG Producciones, Soul Train con el eterno Mr. Soul Train Oswaldo Valencia, y el programa de entrevistas de opinión Frente al personaje con Oswaldo Morocho. Entonces la mirada y la mente del espectador pasan de un show de entrevistas a artistas, el que próximamente premios Videocontrol, a un espacio de videos musicales y biografías de la música gloriosa de las décadas de los 70 y 80, a un calmado set donde se aprecian entrevistas serias y contextualizadas sobre temas de interés nacional como la comercialización y los subsidios de los hidrocarburos. En Videocontrol, que puede aparecer en ciudades como Miami o Bogotá, Jorge Gutiérrez conocido como JG -duro de JG Producciones que es la empresa responsable del espacio-, se revelan las intimidades y pasiones artísticas de personajes como Barek o Américo. El formato es ágil, se centra bastante en la combinación de espacios exteriores, muchas veces más cómodos para el invitado que para la producción, intercalados con videos de la producción de un tema musical, álbum o audiovisual que cimenta la carrera del artista invitado. La dicción de JG no es la mejor, pero tampoco es tan deficiente como las de algunos anchors de programas de canales UHF, la fortaleza de este productor, director y talento de pantalla de su propio programa es la conexión que logra con sus invitados y el conocimiento que demuestra del arte musical. Soul Train es otra historia, ya que programa y animador/conductor vienen garantizados de muchos otros canales del VHF y del UHF, además del dial de la radio ecuatoriana. Oswaldo Valencia, Mr. Soul Train, no es ningún improvisado y aunque molesta para nuestros tiempos modernos verlo tan solo sentado en su clásico sillón presentando videos y biografías de las glorias de la música de los 70, 80 y a veces de los 60 y 90, el que lo acompañe como escenografía una gran cantidad de material visual de las épocas musicales que relata es gratificante. También molesta que dentro del programa deban aparecer los números de celular de Valencia y que él mismo deba promoverse, en una mención, como proveedor de un servicio de organización y artistas para grandes fiestas del recuerdo, cuando esa función la pudiera cumplir Canela Televisión con un spot o comercial. Frente al personaje con Oswaldo Morocho es solo para los informados o los que buscan informarse. No es novedoso en su producción, pero este espacio de entrevistas de opinión desnuda temas interesantes e importantes, no como cualquier otro, ya que el estilo mesurado de Oswaldo Morocho es clave. Sí los diálogos pueden resultar lentos, aburridos a veces, pero se nota un trabajo de periodismo audiovisual de primera.