A criterio del investigador Carlos Calderón Chico, el movimiento sindical en el país ha dejado de lado el verdadero  propósito que lo llevó a su formación, que es la lucha por la unidad sindical. “El movimiento obrero no puede tener otro propósito que la unidad sindical; no estar unidos frente a las arremetidas patronales es condenarse a jugar con fuego, con la traición de sus luchas”, menciona el historiador y catedrático. Agrega, además,  que este sector ahora solo busca pequeñas canonjías, lo que ha llevado a la ruptura del sector y a perder la unidad de los trabajadores. Con esta perspectiva, Carlos Calderón ve al movimiento obrero en general muy debilitado debido a la falta de preparación sindical y considera, un tanto pesimista,  que “otro 15 de noviembre ronda y puede llegar en cualquier momento”.