Jóvenes y adultos con discapacidad de los centros diurnos del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), en Quito, reciben clases virtuales de danza, pintura, teatro y música, con el fin de impulsar el desarrollo de sus habilidades y destrezas durante la emergencia sanitaria. Esta actividad es parte de la inclusión y de la estrategia de intervención y atención impulsada por la Secretaría Técnica Plan Toda Una Vida (STPTUV), con el apoyo de la Casa de la Cultura. Patricia Garrido, profesora de danza, sostiene que es importante incluir a las personas con discapacidad en estos espacios, como terapia para mejorar su autonomía. “El arte es una forma de expresión que no discrimina y que permite un desarrollo mental no convencional mejorando la autoestima”. La STPTUV envía a los beneficiarios el material audiovisual donde reciben instrucciones de cómo realizar los talleres artísticos. (I)