Las festividades que predominan en cada parroquia o cantón del Ecuador son el reflejo de una nación multicultural y pluriétnica. Las diferentes manifestaciones culturales son una muestra del sincretismo que perdura con el tiempo. Este año, por ejemplo, Píllaro espera la llegada de unos 50.000 visitantes nacionales y extranjeros durante los seis días de festejos de la "Diablada", lo que representa una buena oportunidad para fortalecer el turismo, la economía local, la actividad artesanales y la rica gastronomía de esa región andina de Ecuador.Los diablos junto con las guarichas (mujeres jóvenes) y los "oficiales" desfilan por las calles de Píllaro en una colorida danza al ritmo de los tambores y las trompetas de varias bandas de pueblo que, igualmente, lucen en estos días sus mejores galas.Los diablos bufan y maldicen mientras danzan con un ritmo pegajoso que asusta y divierte a los visitantes, algunos de los cuales se animan a integrarse por algunos minutos a la impetuosa coreografía.Las diferentes partidas o grupos se alternan en pasar por la plaza de Píllaro que vive un carnaval andino en el inicio del año.