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El Telégrafo
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El Pedestal, un barrio que está lleno de tradiciones

El barrio El Pedestal ha crecido en los últimos años, convirtiéndose en un sector moderno de la ciudad. En este sector está incluida la parroquia urbana Sucre, las más grande que tiene la ciudad de Loja y consecuentemente la más poblada.
El barrio El Pedestal ha crecido en los últimos años, convirtiéndose en un sector moderno de la ciudad. En este sector está incluida la parroquia urbana Sucre, las más grande que tiene la ciudad de Loja y consecuentemente la más poblada.
25 de mayo de 2014 - 00:00 - Redacción Regional Sur

El barrio El Pedestal nació con una  vista privilegiada. Desde este lugar se podía contemplar todo el panorama a su alrededor. Los moradores y  visitantes apreciaban los  templos como San Francisco, San Sebastián, la Catedral, Santo Domingo, El Valle, las casas  coloniales y republicanas de ese entonces.

La parroquia urbana Sucre, actualmente la más grande de la ciudad de Loja, nació en el barrio El Pedestal, la misma fue inaugurada el 24 de mayo de 1927 junto con la  construcción de la iglesia principal.

Hernán Ojeda, párroco, relata que anteriormente había una pequeña capilla y una estatua de la Virgen de la Inmaculada Concepción de  Loja. El monumento tiene una historia particular respecto a su ubicación. Al principio, el clero lojano tenía previsto colocarlo en la plaza Central, sin embargo, las autoridades  civiles de línea liberal de aquella época no lo permitieron, por  ello fue instalada en unos de los miradores tradicionales de la urbe, es decir en El Pedestal, al occidente de la ciudad.    

Diego Castro, investigador turístico, manifiesta que el mirador del barrio El Pedestal, es uno de los de mayor  historia y tradición de la capital provincial. “Está situada la  imagen de  bronce de la Virgen de la Inmaculada Concepción de Loja”. Sostiene que en la década de los cincuenta fue la última vez que el pueblo afroecuatoriano, radicado en el Valle de Catamayo, rindió tributo a  la  venerada imagen a la que llamaban Virgen Morena o Negra.

Los fieles se trasladaban en acémila y a pie cargados de productos agrícolas. Durante las noches, alrededor de la fogata, bailaban danzas al ritmo de la banda mocha y vestían atractivos y coloridos atuendos. Castro comenta que las familias lojanas acudían a esta fiesta llevando alimentos y ropa para la comunidad afrodescendiente durante su permanencia de  una semana.

El 20 de agosto de todos los años la Virgen del Cisne, que venía en peregrinación desde su santuario a la Catedral lojana, hacía un descanso en El Pedestal. Se desarrollaba la misa y el cambio de vestimenta de la sagrada imagen, luego las autoridades de la localidad trasladaban en hombros la urna de la Virgen por la calle Eplicachima, luego por la 10 de Agosto hasta culminar la caminata en la iglesia Matriz. Hernán Ojeda aseveró que en la iglesia de la Inmaculada Concepción de El Pedestal, pese a tener 90 años de edificada, se mantienen varias de sus reliquias. Actualmente reposan allí, además del retablo, 2 pinturas al óleo que datan de 1860 y pertenecen a José Marcelino Poma.

La parroquia eclesiástica El Pedestal fue fundada por el religioso Julián Lorente en la década de los sesenta del siglo pasado.      

En el mirador se situaba la tradicional cruz, motivo de las fiestas de mayo, pero por la regeneración de la plazoleta fue destruida por el Municipio de Loja. Entre las historias se dice que en 1911 el señor Víctor Manuel Samaniego sufrió un quebranto es su salud. Su esposa, María Cristina Valdivieso, rezó y pidió al Santísimo Sacramento la pronta recuperación. Al ser escuchada su súplica, María Cristina prometió adorar al Santísimo. Cuando falleció, esta promesa continuó con sus hijas y nietas. Los  familiares colocaron una placa recordatoria junto a la puerta principal.

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