La reserva ecológica de Arenillas fue el sitio escogido para que las Fuerzas Armadas clausuraran las maniobras conjuntas que realizaron durante siete días.

Intervinieron alrededor de 7.000 uniformados del Ejército, Fuerza Aérea y Fuerza Naval. Estos últimos lo hicieron en las costas del archipiélago de Jambelí. Como todos los años, los soldados rindieron un examen para verificar su preparación y la operatividad de los equipos que poseen.

La ministra de Defensa, María Fernanda Espinosa, estuvo en el acto como invitada especial y observó cómo realizaban el ejercicio militar con el uso de fuego real. La operación militar en Arenillas  contó con la participación de dos ramas militares (Aérea y Terrestre).

Los uniformados simularon la recuperación de territorio nacional ocupado, supuestamente, por un ejército enemigo.
Para el efecto utilizaron cañones de artillería de 105 y 155 milímetros, morteros 4,2 milímetros, seis aviones de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), siete helicópteros M-I, Súper Puma y Gacel, y 20 tanques Urutú, Cascabel y Arabá.

Con el lanzamiento de morteros se inició una serie de explosiones continuas, acompañadas por incursiones de tanques que permitieron a los soldados cercar al enemigo. Luego tres helicópteros acompañaron a estos vehículos en el bombardeo, mientras que los militares prepararon el ataque decisivo contra las “fuerzas enemigas”.

A las 12:45 se escucharon los últimos disparos de metralleta efectuados por militares. De inmediato se dio paso a la colocación de la bandera ecuatoriana simulando que se recuperaba el territorio. “Me he quedado sorprendida al ver el altísimo nivel de los miembros del Ejército ecuatoriano. Eso nos llena de tranquilidad y orgullo, porque sabemos ese doble rol que cumplen nuestras Fuerzas Armadas. Por una parte está la defensa de nuestra integridad territorial y por otra,  el trabajo que nos permita garantizar la seguridad interna”, dijo la secretaria de Estado.

Uno de los actos más trascendentes fue cuando descendió un miembro de la Fuerza Aérea, desde un paracaídas, portando el símbolo patrio que entregó a Fernando Espinoza, comandante de Paracaidistas del Ecuador. Posteriormente, el oficial entregó la bandera a la ministra de Defensa.

Hoy, los soldados tienen previsto realizar maniobras en el cantón General Villamil (Playas), en la provincia del Guayas. También, mañana acudirán hasta la Península de Santa Elena, en donde se realizarán maniobras con la Marina. En las que intervendrán buques y pequeñas embarcaciones de combate.

Evaluar el profesionalismo del personal militar, así como evidenciar el estado actual de todo el material perteneciente a Fuerzas Armadas es el objetivo de las maniobras. Los ejercicios forman parte de la planificación anual y sirven de  entrenamiento para sus miembros.

Las jornadas, de acuerdo a un vocero militar, contribuyen a la preparación integral de los soldados en los diferentes niveles de mando que trabajan diariamente para mantener la seguridad externa e interna de la Patria.