Las terminales terrestres del norte y sur de Quito se vieron copadas la noche del jueves y la mañana de ayer con viajeros que buscaban un puesto en los buses interprovinciales que partían hacia las provincias de la Costa, Sierra y Amazonía.

Para Luis Erazo, subteniente de la Policía Nacional, el control por parte de la fuerza pública  dentro de las terminales terrestres abarcaba desde la organización de las filas de pasajeros, pasando por el control de personas sospechosas hasta la inspección de los valores de los pasajes en las empresas de transporte.  

Erazo agregó que el control es integral, por ello a los choferes también se les inspecciona. 

En la terminal de Carcelén, al norte, entre la noche del jueves y ayer  (12:00) se registró la salida de más de 5.000 personas hacia provincias como Carchi, Imbabura, Esmeraldas y otros cantones de Pichincha.

En la Terminal Terrestre de Quitumbe, al sur, las cifras se habrían triplicado, según reporte de las autoridades.

Carlos Tamayo y su esposa Katty Vera decidieron pasar el feriado en Otavalo (Imbabura), por la cercanía a Quito y por los costos, y con el fin de disfrutar del puente vacacional por la fecha cívica del 24 de Mayo (Batalla de Pichincha).

Sin embargo, para ellos está presente el temor de los accidentes de tránsito. La Policía desplegó a 21.700 uniformados para el operativo de seguridad del feriado que se inició  ayer.