El frío de la madrugada no impide que los deportistas, profesionales y aficionados se concentren en el parque La Carolina, un ícono del norte de Quito. Ciclistas y atletas rompen el silencio de las calles aún opacadas por la neblina y la llegada del esmog. Personas de toda edad, con shorts y chompas ligeras, comparten el reto de mantener un buen estado físico. También acuden practicantes de disciplinas nuevas, como el crossfit y el street working, que cada día ganan más seguidores. Con los primeros rayos del Sol, la rutina se complementa con los negocios y oficinistas esperando un bus. {unitegallery pa_lacarolina_06_08_16}