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El ministro Ricardo Patiño visitó esta semana los repartos de cuatro ciudades

Ricardo Patiño: "A nadie se le ha cruzado por la cabeza cerrar el Issfa"

El ministro Ricardo Patiño durante la socialización este viernes en la Base San Eduardo, en Guayaquil.
El ministro Ricardo Patiño durante la socialización este viernes en la Base San Eduardo, en Guayaquil.
Foto: tomada del Ministerio de Defensa
02 de julio de 2016 - 00:00 - Redacción Política

Las ciudades de Riobamba, Latacunga, Machala y Guayaquil fueron visitadas por el ministro de Defensa, Ricardo Patiño, para socializar las reformas a la cesantía y pensiones del Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa).

El secretario de Estado acudió los repartos militares para explicar el alcance de la propuesta. El objetivo de los cambios es que todos los miembros de las Fuerzas Armadas accedan a la cesantía en cualquier momento de su retiro.

Las charlas están encaminadas a recalcar que la propuesta genera equidad e igualdad. En cada sitio, Patiño aseguró que las pensiones están garantizadas constitucionalmente, tras las enmiendas aprobadas en diciembre pasado.      

El miércoles, por ejemplo, estuvo en las instalaciones de la Brigada Blindada Galápagos, a la cual asistieron cerca de 46 oficiales y 432 voluntarios. Luego se trasladó a  Latacunga y en la sede de la Brigada Patria se reunió con 74 oficiales y 453 voluntarios.

En ambos lugares el Ministro explicó que el sistema de seguridad social de las Fuerzas Armadas actualmente es “insostenible e inequitativo”. Eso ha producido una enorme brecha entre el personal militar.

La propuesta incluye mecanismos para garantizar la equidad para todos los servidores militares. “Se pretende eliminar las diferencias injustificadas e injustas que solo han hecho daño a la institución”.

El jueves viajó a Machala. En el auditorio del Grupo de Artillería Bolívar socializó la propuesta con 59 oficiales y 200 voluntarios. En la jornada, el secretario de Estado expresó la necesidad de construir una sociedad del buen vivir. Y para ello, dijo, se deben mejorar las condiciones de vida de todos los miembros de las Fuerzas Armadas.

A más de hacerles conocer la propuesta, también recordó los beneficios que ha impulsado el Gobierno  en estos 9 años. Por ejemplo, citó que en este tiempo se mejoraron los salarios del personal militar y que con las reformas tendrán un incremento en su ingreso neto mensual equivalente al 5.5%.

También enfatizó que la propuesta de homologación salarial reducirá sistemáticamente la brecha entre los distintos grados. Ahora se considerarán  criterios técnicos para el cálculo de pensiones.

Patiño rechazó rumores que han circulado respecto a la supuesta desaparición del Issfa. “Es una institución que depende de los aportes del Estado y de sus descuentos. Lo mejor es que continúe existiendo. A nadie se le ha cruzado por la cabeza cerrarla. Es una institución que tiene historia y que en ese tiempo ha cumplido con su papel”.

La última escala de estas socializaciones fue Guayaquil. Ayer, en la mañana acudió a la Base Naval Norte y en la tarde a la Base de la Infantería de Marina de San Eduardo. La gestión de Patiño ha sido boicoteada por militares en servicio pasivo. En Machala, manifestantes vertieron expresiones homofóbicas contra el secretario de Estado. Es una actitud que inició cuando Patiño fue nombrado ministro de Defensa. Los militares retirados han acudido a la Recoleta, sede de esta cartera en Quito, con leyendas y consignas discriminatorias.   

En Guayaquil ayer ocurrió algo similar. En los exteriores de la Base Naval Norte un grupo del personal retirado exigió su ingreso al recinto para exponer sus inquietudes, lo que fue impedido por militares que custodiaban los exteriores. En las redes sociales circularon imágenes de manifestantes increpando a los soldados.

Otro grupo, sobre todo de jóvenes, se apostó también en el sitio para expresar su respaldo a Patiño, pero el personal en servicio pasivo continuó su acción en la Base San Eduardo, donde también fue impedido de ingresar a las instalaciones militares. Incluso intentó cerrar el paso a un bus que transportaba a los soldados.

Sergio Figueroa, vicepresidente de la Federación Huancavilca, que aglutina al personal pasivo de Los Ríos, Guayas, Manabí, Galápagos y Santa Elena, expresó que ellos no están de acuerdo con el Ministro de Defensa. “Aparte de que no hemos sido consultados, ya se ha presentado un proyecto de ley que supuestamente se ha socializado, pero recién se lo está haciendo, es decir, ya está planteada una reforma y ni siquiera nos han consultado”.

Quieren ser recibidos en comisión general para plantear las propuestas del sector. Su objetivo es  que “se reforme el consejo directivo del Issfa y la fórmula como se están liquidando las jubilaciones. Queremos que la cesantía se mantenga y no queremos que se nos pague en bonos, por eso estamos aportando  hasta la fecha de acuerdo a los rubros regulados en la ley de seguridad social”.

Un grupo de militares en servicio pasivo protestó la tarde de ayer en los exteriores de la base San Eduardo de la Infantería de Marina, en Guayaquil. Foto: William Orellana/ El Telégrafo

Homologación progresiva

La reforma tiene por objetivo equilibrar el sistema de seguridad social de las Fuerzas Armadas y eliminar las brechas entre el personal militar. Con ello se busca la homologación progresiva. Habrá un proceso de transición ordenado y transparente para que existan condiciones dignas e igualitarias entre soldados activos y pasivos. A más de la socialización, la visita pretende evitar distorsiones en la información que pueda causar algún tipo de malestar entre los militares. Así lo aclaró en un comunicado el mismo Ministerio de Defensa.

Aclaración de información

A pesar de ello, un medio de comunicación escrito de la capital había informado que en la jornada que se efectuó en la capital orense, se produjo la retirada de personal militar mientras el Ministro hacía su exposición, supuestamente debido a la inconformidad por la propuesta.

El Ministerio aclaró que durante la jornada Patiño atendió las inquietudes del personal militar que se reunió en el Grupo de Artillería.

Ese comunicado recuerda que algunos medios de comunicación, “entre ellos diario La Hora, se hicieron eco de un video con información tergiversada y sin contrastar la fuente oficial. En el video se afirmó que el Ministro de Defensa rechazó responder las preguntas formuladas durante la socialización, lo que no corresponde a la verdad”.

Además, agrega, se asegura que los asistentes abandonaron la sala por supuestos desacuerdos, lo cual también carece de veracidad. En ese sentido, el Ministerio aclaró que el proceso de socialización en Machala se realizó por más de 4 horas “y debido a la extensa jornada el Ministro de Defensa propuso un receso de 15 minutos para que el personal militar prepare sus preguntas”.

Y luego del receso ingresaron nuevamente al auditorio donde todos pudieron expresarse libre y voluntariamente. En ese sentido, sostiene el comunicado, el Ministro absolvió las preguntas por escrito y las realizadas verbalmente por los asistentes.  

Mientras que el canal Ecuavisa, en su cuenta de Twitter informó sobre las protestas en San Eduardo y graficó la nota con el grupo de personas que respaldaba a Patiño. La publicación generó la reacción de la asambleísta Gina Godoy, quien contestó a la emisora y explicó que la fotografía no correspondía con la noticia. (I)

DATOS

La propuesta plantea pensiones equitativas. Así, un general del Ejército con 38 años recibiría $ 4.749; un general de división con 37 años, $ 4.587; un general de brigada con 36 años, $ 4.323; un coronel con 33 años, $ 3.739; un teniente coronel con 27 años, $ 2.727; un mayor con 23 años, $ 1.968.

Para el personal de tropa la propuesta es: Suboficial mayor con 32 años, $ 2.215; un suboficial primero con 31 años, $ 1.919; un suboficial segundo con 30 años, $ 1.539; un sargento primero con 28 años, $ 1.307; y un sargento segundo con 22 años, $ 906.  

En la socialización se explica que la reducción de pensiones es marginal y busca la equidad progresiva en las FF.AA., considerando que los militares deben tener condiciones dignas de retiro. La homologación al Sistema de Seguridad Social General reduciría esa brecha.

Sobre las cesantías se propone la suma del aporte personal, el patronal, el del Estado (Losep) -5 salarios básicos unificados por año de servicio desde el quinto año y hasta un monto máximo de 150 salarios básicos unificados- y un monto adicional temporal.

Con la ley actual el 81,1% que equivale a 33.043 militares recibirá una cesantía mayor; el 18,8% (7.648 militares) el mismo valor; y el 0,1% (44 militares) una menor.

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