Con la instalación de alrededor de 3 millones de cocinas, prevista hasta 2018, se evitará la emisión a la atmósfera de millones de toneladas de dióxido de carbono. Así lo dio a conocer el Presidente  durante el enlace de ayer. Eso equivaldría a retirar de las calles unos 800 mil vehículos. Dijo que  la inversión representa también un ahorro económico y mayor seguridad, pues el gas licuado de petróleo que se utiliza actualmente en la  cocción de alimentos es, además de importado, peligroso por la cantidad de accidentes  que provoca. Tras desestimar las críticas de los opositores aseveró que el proyecto asombra a la región y ha despertado el interés de Chile y del BID.