Nadie pensaría que las 7 medallas de oro en gimnasia que acaba de ganar el manabita Gilberth Serrano Mera comenzaron con la habilidad innata de dar saltos mortales en un colchón de cama a los 4 años de edad. “Cuando lo vi me quedé pasmada”, manifiesta sorprendida Leonor Mera, madre del exponente.

El dorado ‘botín’ que Gilberth alcanzó en la ‘I Copa Sudamericana de Clubes’, efectuada en ciudad de Panamá, entre el martes y el viernes de esta semana, incluye los primeros puestos en barra fija (11.96 puntos), paralelas (11.90), salto (13.33), anillas (11.43), arzones (10.23) y piso (12.93). Además del título su- damericano en el all around (8 en total) de la categoría juvenil.  

Este logro le dejó el polvo a su primera conquista internacional, cuando en 2013 integró el equipo ecuatoriano que alcanzó la medalla de bronce en el Campeonato Sudamericano Juvenil que se realizó en la Sogamoso, Colombia.    
De la travesura al podio

Hace 12 años, mientras Leonor y sus 2 hijos (Gilberth Steven, el mayor, y Gilberth Augusto, el menor) disfrutaban de unas vacaciones en Quito, a ella casi le da un soponcio al descubrir a Gilberth Augusto dando brincos y trampolines en el aire sobre un colchón en el suelo.     

Enseguida telefoneó a su esposo, Gilberth Serrano Piza, y se lo comunicó. Pese a que también fue gimnasta, al progenitor le resultó difícil creerle a su cónyuge, pues no le había enseñado ningún ejercicio a Gilberth Augusto. Eso empujó a que Leonor filmase las destrezas del pequeño y le enviara el video a su pareja. Aquello constituyó el inicio de una carrera deportiva ascendente, que cada vez da mejores frutos.   

La disciplina de la gimnasia ha moldeado el carácter del adolescente, quien en la actualidad cursa el segundo curso de bachillerato en la Unidad Educativa Rosa Cedeño de Granizo. “Es muy ordenado, sencillo y bastante generoso”, menciona orgullosa Leonor.  

En cambio, al escuchar el nombre del establecimiento educativo, en Gilberth Steven (19 años), su hermano mayor, se activa un recuerdo que, pese a la suma de calendarios, sigue latente.

Cuando niños, Gilberth Steven de 10 años, y Gilberth Augusto de 7, sufrieron una estrepitosa caída junto a su abuelito Augusto, quien los llevaba en una bicicleta tras retirarlos de la escuela.

“Yo iba detrás, y mi ñaño adelante; sin darse cuenta, Gilbert Augusto metió uno de sus pies en los radios de la llanta delantera y ¡Pum!, todos volamos. Augusto llevó la peor parte, se estrelló contra la vereda y se dio un severo golpe en la frente. Sinceramente me desesperé por él... Al final me tranquilicé porque solo le salió un chichón”, describe.  

Con el talento en la sangre

No lo puede evitar. Cada logro de su hijo en la gimnasia artística es para Gilberth Serrano Piza (41 años) una extensión de su propia vida, pues los triunfos del junior los toma como suyos. Los siente en carne propia, tanto como el cetro sudamericano que se adjudicó en Cuenca, también a los 16 años de edad.  

La afición de su hijo por los ejercicios físicos transformaron su existencia, por eso él incursionó en la dirigencia deportiva y hoy es vicepresidente de la Federación Ecuatoriana de Gimnasia Olímpica.  

Pero la vida sacrificada del cultor no solo se remite a entrenar 4 horas al día, igualarse en las materias del colegio en los recreos después de un viaje, o evitar fiestas y paseos para no descuidar su plenitud de forma. También le agrada escuchar pop y baladas en otro idioma, salir a los centros comerciales, comer dulces y navegar por internet.
 Serrano Piza asegura que, a futuro, a Gilberth Augusto le agradaría ser médico; sueña con ganar una beca para estudiar en el exterior, preferiblemente en Inglaterra, porque adora hablar en inglés.

A Gilbert Steven le preocupa mucho la fijación de su hermano por conseguir la perfección en todo lo que hace. Con el paso del tiempo va perdiendo el miedo escénico que lo invadía antes de competir y luce cada vez más seguro de salir airoso en cualquier lugar del mundo. (I)   

Datos

Gilberth Augusto Serrano Mera nació en Portoviejo el 4 de septiembre de 1999. Tiene 2 hermanos: Gilberth Steven (19 años) y Gilberth Auriel (8 años).   

En la actualidad el adolescente no recibe ayuda económica de ninguna entidad deportiva. En 2013, la Federación Deportiva de Manabí le aportó por un año una beca de $100 mensuales.  

Los ejercicios que domina con mayor destreza son los de piso, salto, barras paralelas y barra fija. Su entrenador es Enrique Toro; antes lo instruyeron Amado Sabando y Francis Giler.

Gilberth Serrano Mera fue el único representante varón que Ecuador tuvo en la primera Copa Sudamericana de Clubes. Completó 7 de 8 medallas de oro posibles.