Denia Caballero llegó de favorita a la prueba de lanzamiento del disco en los Juegos Panamericanos de Toronto-2015 por ser la líder del ranking mundial, pero pocos sabían que por dentro estaba afectada al enterarse en plena competencia de que su abuela había sufrido un infarto en Cuba. “La tuve todo el tiempo en mi mente, y en cada lanzamiento pensaba en ella. Me decía que si ganaba el oro, ella se iba a recuperar y tengo la esperanza de que así sea”, declaró Caballero momentos después de ganar la medalla áurea. La villaclareña ganó la presea dorada con un lanzamiento de 65,39 metros en su tercer intento, para dejarle la de plata a su compatriota Yaime Pérez (64,99) y el bronce a la estadounidense Gia Lewis-Smallwood (61,26). La cubana ya había logrado el bronce en la disciplina en Guadalajara-2011, y este año encabeza el ranking mundial con un disparo de 70,65 metros, logrado en junio en una competencia en Bilbao (España). En la zona mixta, contenta por su victoria, la cubana de 25 años tuvo que interrumpir su conversación con los periodistas al estallar en llanto cuando se le preguntó cuánto sacrificio había detrás de esta medalla. “Este ha sido un año duro por muchas cosas personales. En estos momentos quisiera estar en Cuba y no aquí”, dijo. Tres días antes de la competencia, Denia se enteró de que su abuela, con quien se crió en su natal Villa Clara, al centro del país, había sufrido un infarto, pero ya lo estaba superando y al día de hoy se encuentra en recuperación. (I)