El uso de un método anticonceptivo adecuado puede evitar problemas de salud sexual y casos de embarazos no deseados, pero el acceso a los mismos no siempre es masivo.

En Ecuador el 7% de las mujeres no usa un anticonceptivo que necesita, pero esta realidad no responde a una problemática de orden local, pues, según datos de Global Burden of Disease, 163 millones de mujeres en todo el mundo no tienen acceso al anticonceptivo adecuado.

Por otro lado, según datos de Care, en Ecuador el 12% de las adolescentes se han embarazado y el 78% de dichos casos se registraron en niñas de entre 10 y 14 años de edad, un escenario que representa un costo de alrededor de 270 millones de dólares anuales para el Estado.

Este monto responde al equivalente por las pérdidas de oportunidades en actividades de producción. La importancia de usar un anticonceptivo adecuado es que, además de brindar una mayor calidad en cuanto a la salud reproductiva, evita complicaciones en las esferas económicas familiares, locales y nacionales.

El Estado ecuatoriano trabaja de forma transversal con varias instituciones como el Ministerio de Salud, Ministerio de Educación, Secretaría de Derechos Humanos para abordar esta temática que incluso tiene un apartado en normativas vigentes del actual régimen que está alineada con la visión y objetivos de las Naciones Unidas.

Procesos de educación sexual son considerados pilares fundamentales alrededor de esta temática y nuevos abordajes de género intentan crear conciencia en cuanto a que la concepción no depende solamente de la mujer.