‘El Chapo’, experto en túneles

Redacción Justicia

La fuga del jefe del cartel de Sinaloa, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera, de la prisión de máxima seguridad del Altiplano, en el estado de Juárez, es un asunto que trasciende las fronteras mexicanas. Las regiones de Norte y Centroamérica permanecen en alerta máxima para evitar que el narcotraficante ingrese a alguno de los países vecinos.

En Estados Unidos, el multimillonario Donald Trump aprovechó la fuga de ‘El Chapo’ para arremeter nuevamente contra México y sus migrantes: “¿Han visto?, se los dije”, comentó Trump; mientras que el diario The New York Times calificó al evento como vergonzoso para el gobierno de Enrique Peña Nieto, quien se encuentra desde el domingo en una visita oficial a Francia. El periódico neoyorquino recordó que ‘El Chapo’ había sido requerido por EE.UU., pero México negó la extradición y garantizó su encierro en la cárcel más vigilada y segura del país. Peña Nieto dijo en 2014 que “otra fuga de ‘ElChapo’ sería verdaderamente imperdonable”, pues en 2001 ya estuvo encarcelado y también escapó. Países como Guatemala, Honduras y El Salvador montaron sendos operativos para evitar que Guzmán Loera cruce sus fronteras.

Hasta ayer, 34 personas -entre empleados de distintas áreas del penal del Altiplano, incluido el director, Valentín Cárdenas, y el dueño de la propiedad por donde salió ‘El Chapo’, Calixto Estrada- seguían detenidas. Todas rindieron declaraciones para determinar el grado de responsabilidad, pero las autoridades no adelantaron información para no entorpecer la pesquisa. Expertos forenses recorrían centímetro a centímetro el túnel de 1,5 km y los alrededores de la propiedad de Estrada para recabar la mayor cantidad de evidencias: una bombona de gas, latas de cerveza, una lavadora y una cocina improvisada eran los objetos más visibles.

Cómo trabajaron el túnel

Expertos en construcciones consultados por el periódico Excélsior, de México, calcularon que la construcción del túnel, de 1,5 km, 1,70 m de alto y 80 cm de diámetro, debió generar 500 toneladas de escombros. Para retirar aquello se necesitaron 379 viajes de camión cargados con 7 metros cúbicos de tierra cada uno.

Los ingenieros creen que en el trabajo debieron participar 4 personas: 2 cavando y 2 botando tierra. Debieron deshacerse de los escombros con un camión diario para no despertar sospechas en el sector. Antes de irse, eso sí, ‘El Chapo’ se aseguró de tomar su medicina. (Con información del diario Excélsior, revista Proceso y Agencia Prensa Latina) (I)