En Egipto, en la necrópolis de Saqqar, un equipo de excavación descubrió una tumba con restos de varias momias. En una de ellas se encontró un detalle particular: el nombre ‘Messi’. La historia llamó la atención y fue recogida en el medio argentino Página 12. La momia era un sacerdote que llevaba el mismo apellido del astro argentino y campeón del mundo, Lionel Messi. El cuerpo momificado estaba cubierto de oro y fue encontrado dentro de un sarcófago que no había sido abierto en 4.300 años. El equipo, dirigido por Zahi Hawass, también encontró otras momias. Un hombre llamado ‘Khnum-djed-ef’ fue el sacerdote del faraón Unas y supervisor de los nobles y Meri, una asistente del palacio real. Adicionalmente, se halló grandes cantidades de estatuas pertenecientes a los faraones enterrados. El problema, de acuerdo a Hawass, fue que no se pudo reconocer a los dueños de los adornos, debido a su estado. A esto se suma amuletos, vasijas hechas de piedra, herramientas y artículos dedicados a la vida de su época,y otras estatuillas de dioses y deidades.