Estados Unidos tildó este viernes de "atroz" el doble ataque suicida perpetrado en una academia militar de Charsada (Pakistán), que causó al menos 88 muertes, y subrayó la necesidad de cooperar con Islamabad para desmantelar la red terrorista Al Qaeda. "Estados Unidos condena firmemente el brutal ataque que mató a montones de personas inocentes e hirió a muchas otras en el campo de entrenamiento militar", dijo en su conferencia de prensa diaria el portavoz del Departamento de Estado, Mark Toner. "Lo consideramos atroz y creemos que sólo subraya la amenaza existencial que este tipo de organizaciones extremistas suponen para Pakistán, y lo importante que es que sigamos trabajando juntos para vencer y desmantelar a Al Qaeda y sus aliados", añadió. El movimiento talibán paquistaní (TTP) ha reivindicado la autoría del atentado, el más grave que ha vivido Pakistán en 2011, y aseguró que se trataba de "una venganza por la muerte de Osama Bin Laden". No obstante, Toner restó importancia a la posibilidad de que se trate del primero en una ola de ataques en venganza por el asesinato del líder terrorista, abatido el 2 de mayo por militares estadounidenses. "Los talibanes paquistaníes han demostrado que están dispuestos a cometer espantosos actos de violencia por muchas razones diferentes. ¿Quién sabe cuál era la razón real para el ataque de hoy?", indicó. El funcionario estadounidense extendió sus "condolencias" a las fuerzas armadas paquistaníes y las familias de las víctimas, y subrayó que los terroristas "han demostrado constantemente que son el verdadero enemigo del pueblo y el Gobierno de Pakistán". Según fuentes policiales consultadas por Efe en Islamabad, 79 reclutas de la guardia de fronteras ("Frontier Corps" o FC) y nueve civiles perdieron la vida en el doble ataque suicida en la ciudad de Charsada, situada a dos horas en coche de Islamabad. De los 105 heridos contabilizados, 25 están en situación grave.