Un mortal incendio en la región de Xinjiang, en el noroeste de China, desató una ola de furia por la política de “cero covid-19”, en momentos en que el país lucha contra el hartazgo de la población hacia esta estrategia para contener el coronavirus. Se registraron 35.0000 nuevos casos. Diez personas murieron y nueve resultaron heridas en un incendio que arrasó un edificio residencial en la capital regional de Urumqi, según la agencia estatal Xinhua. Comentarios en redes sociales chinas e internacionales han señalado desde el viernes 25 de noviembre del 2022, que los extensos confinamientos por covid-19 en la ciudad complicaron los esfuerzos de rescate. Algunos videos parecieron mostrar a multitudes protestando en las calles de Urumqi contra las medidas. La creciente frustración con la política de tolerancia cero ante el virus ha generado también protestas en otras ciudades. China es la última de las grandes economías que sigue la estrategia de “cero covid-19”, con confinamientos, cuarentenas extensas y pruebas masivas para erradicar los brotes que surgen. Imágenes parcialmente verificadas por AFP muestran a cientos de personas congregadas en las afueras de las oficinas del gobierno local de Urumqi coreando “levanten los confinamientos”. En otro video, decenas de personas aparecen marchando por un barrio en el este de la ciudad, gritando la misma consigna. Periodistas de AFP pudieron verificar la ubicación de los videos, pero no lograron precisar cuándo ocurrieron las protestas.