El asesinato de Guido Barberán Espinoza, quien recibió al menos 8 disparos en instantes en que descansaba en el pabellón Cuarentena, en donde están recluidas las personas con enfermedades terminales de la Penitenciaría del Litoral, es el octavo que se registra en las cárceles del país desde enero de 2012.

Según Henry Díaz, experto en seguridad, esto evidencia que persisten las falencias de los sistemas y filtros  de seguridad en los centros de rehabilitación social.

El expabellón, catalogado como de máxima seguridad, “La Roca”, en Guayaquil, ha sido precisamente uno de los más vulnerables, donde se registró, en junio pasado, la muerte de Óscar Caranqui Villegas, recluido por narcotráfico.

Antes, el 25 de enero de 2012, José Arroyo Quiñónez, alias ‘Negro José’, uno de los delincuentes que constaba en el listado de los más buscados, fue asesinado a tiros.

Díaz indicó que incluso esto se deriva de una falta de procedimientos operativos y controles internos y externos en los recintos carcelarios.

Según los partes policiales de estos hechos, los crímenes se perpetraron con armas de fuego. “Si es que hay armas en los centros, significa que hay deficiencias y filtros que no han podido ser controlados”.

En octubre de 2012 se dio un hecho que conmocionó a familiares de los internos y autoridades de rehabilitación, cuando tres internos de la Penitenciaría del Litoral murieron en una balacera que se registró  en la cocina de este centro de detención, ubicado en el kilómetro 16 de la vía a Daule.

El Ministerio de Justicia informó que las muertes se dieron por un ajuste de cuentas entre miembros de una misma banda.

En los 36 centros de rehabilitación del país hay un total de 24 mil personas privadas de la libertad (PPL).Los fallecidos fueron identificados como Héctor Calderón, Jorge Álvarez y Miguel Pino, mientras que Byron Ortega resultó herido y fue internado en una casa de salud.

No obstante, desde fines de 2010, el Ministerio de Justicia emprendió un proceso de transformación del sistema penitenciario, mediante el desarrollo de políticas públicas que buscan una efectiva rehabilitación y reinserción social de las personas privadas de la libertad.

La cartera de Estado invierte en la construcción de centros de rehabilitación social en el país, el objetivo es solucionar uno de los mayores problemas del sistema penitenciario: la sobrepoblación.

En otro de los reclusorios con mayor población carcelaria, como el expenal García Moreno de Quito, como es conocido, desde 2010 al menos se han registrado cuatro crímenes y cinco fugas. La última ocurrió en enero pasado, cuando tres cubanos procesados por asesinato escalaron los muros con una soga elaborada con prendas de ropa.

En la cárcel de Quevedo, Los Ríos, desde 2010 se contabilizan -al menos- un asesinato, tres heridos y dos reos que se han escapado.

Asimismo, tres crímenes y cinco fugas registrados desde 2010 dan cuenta de la violencia en El Rodeo, en Portoviejo, Manabí.