Prácticamente no salía de su nuevo domicilio. Evitaba ser visto en público para no levantar sospechas. Marco Antonio Solís el sexto hombre “Más buscado” en Guayas, vivía desde hace varios días en la clandestinidad. Lo hacía en una vivienda ubicada en las calles Loja y Don Bosco, en Cuenca.

Pero un trabajo de inteligencia policial permitió dar con su paradero y aprehensión. El operativo de captura, realizado por miembros de la Policía Nacional, junto con la Fiscalía, se realizó la noche del pasado viernes, en el mencionado lugar de la capital azuaya.

El hombre, que está acusado de ser traficante de tierras en Guayaquil, había fijado, temporalmente, su residencia en Cuenca, indicaron los agentes de la Policía que participaron de la detención.

Solís había arrendado una casa en el sector de la Feria Libre y, según los agentes, tenía custodia personal durante el día. Los gendarmes destacaron, además, que el hombre, en las pocas veces que salía de su domicilio, lo hacía en un taxi que estaba contratado exclusivamente para su uso, lo cual le daba mayor seguridad en su movilización por la ciudad.

La captura fue alrededor de las 22:00 del viernes con una orden de allanamiento a la vivienda, por parte de la Fiscalía, situada en la avenida Loja. Según el jefe de la Policía Judicial (PJ), Germán Cevallos, Solís “es peligroso, por eso está catalogado como uno de los más buscados”.

Según el jefe de la PJ, el ciudadano la mayor parte del tiempo estaba encerrado en la vivienda, disponía de personas que le realizaban las compras para no salir y evitar ser identificado y capturado por la Policía. Solís fue presentado, la tarde de ayer, en los patios de la PJ de Cuenca y estaba previsto que luego sea trasladado a Guayaquil.

Solís, Sergio Toral y los hermanos Balerio y Tony Estacio son considerados los mayores traficantes de tierras en Guayaquil. En la Fiscalía del Guayas hay denuncias contra Solís. Moradores del sector Elvira Leonor se sienten perjudicados por Soliz y acudieron a la justicia para tener solución a sus requerimientos.

De igual forma, hay una denuncia en contra del hombre por estafa, la que fue impuesta por los herederos de Félix Sarmiento Núñez, quienes le vendieron la hacienda El Olimpo en 2009. Según la acusación, Solís ha incumplido el pago acordado por los terrenos (alrededor de 120 hectáreas).

El ahora detenido habría comprado cada hectárea a un precio de 1.800 dólares y posteriormente habría vendido lotes para casas de 8x15 metros en 2.500 dólares.

Si es hallado culpable por el delito de tráfico de tierras, Solís enfrentaría prisión de 2 a 5 años. También enfrentará las demandas hechas por los moradores perjudicados y la acusación de los ex dueños de la hacienda El Olimpo.