En los exteriores del Centro de Rehabilitación Social (CRS) de Ambato, ubicado al suroeste de la ciudad, no se evidencia la presencia de personal militar. La medida fue anunciada el lunes 15 de mayo por el vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner, a fin de mermar los niveles de violencia y evitar el ingreso de armas a las cárceles del país.

De acuerdo a Carlos Manzano, director del CRS Ambato, aún no existe la disposición de las Fuerzas Armadas para que el patrullaje militar se cumpla en las afueras de la cárcel local.

“Si bien entiendo en otras parte del país ya se está aplicando, aquí aún no tenemos la disposición expresa que concrete la medida. Desconozco la fecha en que se empezará a efectivizar, supongo se nos harán llegar un comunicado y que se organizarán mesas técnicas que socialicen este y otros esfuerzos por mantener el orden al interior y en los exteriores de los CRS”, dijo.

Para el funcionario, los patrullajes y controles militares son una disposición oportuna, pues así se fortalece la seguridad de los internos y garantiza que ellos cumplan efectivamente con los programas de rehabilitación. “Los niveles de violencia aquí son muy bajos, no obstante es mejor prevenir a que se repitan las impactantes imágenes de asesinatos que hemos evidenciado en otros centros últimamente”, agregó Manzano.

El plan de militarización también es aprobado por los moradores y dueños de negocios cercanos al lugar. “En varias ocasiones se han producido riñas entre familiares o visitantes de reos de varios pabellones, en el ingreso a la cárcel. Esto vulnera nuestra integridad. Supongo que la presencia de los uniformados evitará estos lamentables espectáculos, así como venta e ingreso de sustancias ilegales”, señaló Miriam Mayorga, habitante del sector y dueña de una tienda en las afueras del CRS Ambato. (I)