El cuerpo de Margarita fue atado con una soga, arrastrado y enterrado cerca de la vivienda de su familia en el cantón Francisco de Orellana, provincia de Orellana.

El sospechoso del crimen fue su cónyuge Nelson C., quien deberá cumplir 26 años de pena privativa de libertad por el delito de femicidio, tipificado en Ecuador desde agosto de 2014. El cuerpo de Margarita, quien fue apuñalada, fue encontrado 3 días después de su desaparición.

Galo Chiriboga, fiscal General del Estado (FGE), precisó que desde esa fecha hasta agosto de este año se obtuvieron 15 sentencias condenatorias por femicidio. “Las penas que se consiguieron van entre los 22, 26 y 34 años de privación de libertad. 42 casos son procesados de las 54 noticias del delito que recibimos. Las restantes son investigadas por otros tipos penales. Además, 3 personas están llamadas a juicio y en 6 casos los presuntos autores fallecieron”, precisó.

Cifras en Ecuador

De acuerdo con cifras de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones Extorsión y Secuestros (Dinased) de enero a la segunda semana de noviembre de 2015 hubo 59 casos de femicidio. La provincia donde más casos se reportaron fue Manabí (8); seguida de la Zona 8 de Policía que comprende los cantones Guayaquil, Durán y Samborondón, donde hubo 6, cifra similar se registró en el Distrito Metropolitano de Quito. En la provincia de Orellana, donde se reportó el caso de Margarita, se conocieron de 4 hechos, al igual que en Chimborazo.

“Los motivos para cometer este crimen, que parecen a veces justificaciones del hecho, suelen ser que la mujer terminó con la relación o lo traicionó. Sin embargo, no se analiza que el victimario la consideró de su propiedad, por lo tanto con poder ilimitado sobre ella. El femicidio va más allá del asesinato. Es el resultado de un ciclo de violencia sistemática contra la mujer, es la forma más extrema de la violencia de género”, destacó el fiscal Chiriboga.

William Martínez, jefe de la Dinased de la Zona 8, manifestó que las principales causas son problemas sentimentales y económicos. “Las parejas empiezan con gritos, insultos y luego golpes. Hay mujeres que no denuncian y si la presentan la retiran, sobre todo por el temor de que haya nuevas discusiones y más violencia. Por ejemplo, de unas 10 mujeres que denuncian, unas 6 abandonan el proceso”, indicó.

El funcionario manifestó que, además, se investigan tentativas de asesinato donde los principales agresores son los convivientes, en estos hechos también hay mujeres que no continúan con los trámites. En Guayaquil, Durán y Samborondón se reportaron 460 tentativas, de las cuales unos 70 casos fueron por violencia intrafamiliar, de hombres que intentaron matar a sus parejas o exconvivientes. “En la mayoría de los casos, en general en las muertes violentas, hay consumo de licor”, enfatizó.

Recordó que en algunos casos los agresores se suicidan. Un hecho reportado este año en la provincia de Los Ríos es el del cabo de Policía Luis Aníbal Criollo Solórzano, de 30 años, quien le propinó 3 balazos a su exnovia Marilin Mayerli Marín Caicedo. Luego se disparó en la cabeza. Los familiares comentaron que entre los jóvenes no había discusiones. La nueva pareja de Luis Aníbal está embarazada.

Tanya Varela, comandante de Policía de la Zona 8, mencionó que se realiza un gran trabajo para erradicar la violencia de género con charlas a la ciudadanía de todas las edades y roles. “La violencia física es la que prevalece. Tenemos 12.000 denuncias de enero a la fecha (23 de noviembre)”, agregó.

Ledy Zúñiga, ministra de Justicia, Derechos Humanos y Cultos, destacó que “desde 2013 hasta la fecha se lograron reducir las muertes violentas de mujeres un 26%”. La funcionaria el pasado viernes acudió a la inauguración de la nueva ‘Casa de Acogida’ para mujeres víctimas de violencia y sus hijos, en la ciudad de Ambato.

La ministra destacó que los puntos de ayuda pueden encontrarse en el sitio web www.elmachismoesviolencia.gob.ec.

Pagarán más de 34 años de cárcel

Víctor Alfonso T.C. fue declarado culpable del femicidio de su cónyuge Priscila Núñez Barona, de 22 años. El hecho ocurrió en la provincia de El Oro y el Tribunal Primero de Garantías Penales de la provincia le impuso una pena privativa de libertad de 34 años al declararlo autor de la muerte.

El individuo la golpeó en el rostro y la asfixió hasta quitarle la vida, luego escapó a la parroquia Río Bonito, en el cantón El Guabo, y cuando fue encontrado intentó quitarse la vida, pero fue impedido por los policías.

En cambio, Ángel A. fue sentenciado a 34 años y 8 meses de pena privativa de libertad luego de que asesinara con un martillo a su exconviviente. El hecho ocurrió en Santo Domingo de Los Tsáchilas. El hombre reconoció que cometió el delito. La joven había terminado días antes la relación sentimental con Ángel A. por las constantes agresiones. Incluso 2 días antes lo denunció en la Fiscalía, pero fue liberado al día siguiente.

El femicidio está sancionado en el artículo 141 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) con una pena privativa de libertad de 22 a 26 años. Sin embargo, cuando hay agravantes la condena aumenta en un tercio de la pena máxima. (I)