Los operadores de justicia del país no están exentos de la delincuencia. El asesinato del fiscal Ramón Loor, de Manabí, fue el suceso que causó mayor conmoción en este año, pues supuestamente su muerte estuvo relacionada con su labor investigativa. El funcionario indagaba el crimen de un profesor de la Universidad Estatal del Sur de Manabí (Unesum).

Otro de los hechos delictivos en los que los afectados fueron funcionarios judiciales ocurrió en Guayaquil. La fiscal de Guayas, Margarita Neira, fue asaltada cerca de su domicilio por antisociales armados. Entre las pertenencias que se le robaron había información importante de casos que investigaba.

No hay que repetir las  rutas de regreso a casa y tener cuidado de a quién se le revela información.

Ante aquello, el pasado fin de semana, cien fiscales de la provincia de Guayas, más otras 30 personas entre asistentes y servidores del programa de protección de víctimas y testigos, fueron preparados por agentes del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) de la Policía Nacional en temas de defensa y autoprotección.

Juan Carlos Vivar, coordinador de capacitación de la entidad en Guayas, manifestó que el doctor Galo Chiriboga Zambrano, fiscal general del Estado, de acuerdo a la actividad de alto riesgo que realizan, creyó pertinente la realización del curso.

La capacitación, que se realizó durante dos días, de 08:00 a 17:00, se dividió en dos partes: teórica y práctica; el eje fue recordarles o enseñarles cómo deberían actuar dentro y fuera de la institución para evitar ser víctimas de un atentado.

Vivar explicó que, por ejemplo, al salir de la jornada laboral hay detalles importantes a tomar en cuenta, como no repetir las rutas de regreso a casa y tener cuidado de a quién se le revelan los lugares que frecuentan, las horas de salida, si estarán solos o acompañados; pues es información que preferiblemente debe reservarse para no convertirse en un blanco fácil.

En el ámbito práctico, los funcionarios aprendieron técnicas para maniobrar un vehículo en caso de que sean interceptados por personas desconocidas. Además, recordaron que no pueden distraerse, sino siempre estar alerta y verificar continuamente, mediante los retrovisores, si alguien los persigue.

Estas prácticas las desarrollaron en las instalaciones del Grupo de Operaciones Especiales, ubicadas en la vía Perimetral.

Riesgos en operativos
A diario, los agentes fiscales realizan operativos, allanamientos, investigaciones, levantamiento de cadáveres, reconocimiento del lugar de un crimen, reconstrucción de los hechos, entre otras intervenciones.

Vivar enfatizó que uno -como en cualquier otra situación- no sabe lo que puede ocurrir, pero sí puede ser precavido.

Los funcionarios, en la mayoría de las actuaciones, no visten chalecos antibalas u otras protecciones, pero siempre van acompañados de agentes de la Policía Nacional o Judicial. “Ellos son un brazo importante para nosotros, si no estaríamos incompletos. Somos dos fuerzas que trabajan en conjunto, ninguna institución es más que otra”, agregó.

Los miembros del GOE les enseñaron la forma correcta para ingresar a un domicilio e impedir ser sorprendidos por alguno de los ocupantes. “Es muy complejo. No podemos ser muy llamativos, hay que intentar ser relativamente imperceptibles. Asimismo, no olvidar el respeto que les debemos a todos los posibles involucrados en un proceso penal y a su familia. Nuestra preparación jurídica nos da esas principales herramientas para saber nuestra postura en el desempeño de las operaciones”, dijo Vivar.

El coordinador de la capacitación mencionó que también acudieron a una cancha de paintball (deporte en el que se emplean armas con proyectiles de pintura) para instruirse y poder reaccionar si en algún momento se es amenazado con un arma de fuego o blanca. “Los elementos del GOE nos enseñaron cómo emplear un arma en un evento de emergencia, practicamos tiros con esas armas; además, eso nos sirvió para integrarnos más y descubrir nuestras destrezas físicas”.

William Aguilar, coordinador de la Unidad de Delitos Flagrantes de la Fiscalía, calificó como positiva y necesaria la capacitación organizada por la Escuela de Fiscales y funcionarios y la Coordinación Nacional del Sistema de Protección de Víctimas y Testigos. “Es importante saber cómo actuar ante un ataque, nos dieron consejos y estrategias de seguridad que son muy útiles”.