Antes de las 11:00 de ayer se instaló la audiencia preparatoria de juicio en contra de 225 militares de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), entre los cuales constan 17 policías en servicio activo y 14 en pasivo, que el 30 de septiembre de 2010 presuntamente se tomaron la pista del antiguo aeropuerto de Quito, Mariscal Sucre. La diligencia fue reservada en la Casa de la Justicia de la capital.

El delito que se investiga es de sabotaje y terrorismo con paralización de servicios públicos, lo que, según establece el artículo 158 del Código Penal Vigente, es sancionado con reclusión de 8 a 12 años.

Stalin López, abogado de 5 de los procesados, afirmó antes de ingresar que espera un dictamen apegado a derecho. “Las pruebas están en el proceso, ninguno actuó para desestabilizar el orden democrático”, dijo.

Para Patricio Armijos, defensor de Humberto Ch., uno de los imputados, es inaudito el delito por el que acusan a los militares. “Ellos han servido al país”. Familiares de los uniformados se aglomeraron en los exteriores de la Casa de la Justicia.

Uno de ellos, Daniela Malavé, esposa de Fausto C, soldado procesado, recordó que él cumplió años el 30 de septiembre de 2010 y que simplemente acudió al aeropuerto obedeciendo órdenes, pues es electricista.