El mensaje que dio el presidente de la República, Rafael Correa, el día de la posesión de los nuevos funcionarios es  doble. Por un lado un mensaje de renovación que alude a una necesidad de dar cambios en algunos aspectos de las estrategias de Gobierno, primero porque los funcionarios no cumplieron las metas o porque existe la necesidad de refrescar con otras figuras.

El segundo mensaje de radicalizar la revolución ciudadana lo liga al Gobierno con los principios y la orientación política del Gobierno, principios plasmados en el 2006 y esos cambios están ligados en el área social y política. Todo parecería apuntar en esa dirección.

De hecho, la presencia de funcionarios como Betty Tola (ministra de Coordinación Política) es  importante porque su trabajo es desde abajo, y si radicalizar la Revolución Ciudadana significa volver los ojos a una iniciativa hecha desde abajo, donde haya una conjunción de energías, esfuerzos desde los sectores sociales populares, entre ellos el movimiento indígena como soporte que ha realizado desde arriba. Designar a Tola es una decisión muy acertada. Es a su vez un mensaje hacia los movimientos sociales de que se puede dialogar.

El retorno de Fánder Falconí (titular de Senplades) fue quien  diseñó no solo el sistema sino parte de los principios del Movimiento PAIS y en los últimos años, con su salida, se nota un estancamiento de los procesos de planificación con miras del futuro. Parece que Senplades entró en una dinámica de aprobación de proyectos de Gobierno, pero ahora se debe retomar esa labor de planificación con ejecución para satisfacer las demandas sociales.

En el caso de figuras nuevas  como Raúl Patiño (secretario de Inteligencia) aún no queda claro qué va a cumplir, pues es una de las secretarías más frágiles y débiles. Hay que hacerla fuerte para compaginar con las estrategias del Gobierno.

La participación ciudadana es fundamental, el Gobierno tendrá que hacer acuerdos, dialogar sobre temas como la ley de aguas y el tema de las tierras. Es indispensable tratar estos temas para el acercamiento con todos los sectores.

Sigo pensando que no está desechado el acercamiento con el sector indígena, esa es la prueba de fuego que tendrá  el Gobierno, a través de la ministra Betty Tola.

La radicalización del proyecto político se dará en base a lo social, no creo que se limite a un momento electoral, hay cabos sueltos que ajustar y estos se basarán en la conciliación.