Debido al aumento de la actividad eruptiva del volcán Tungurahua, el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) resolvió cambiar de amarilla a naranja la alerta en las zonas de influencia del coloso, así como la activación inmediata de los protocolos y planes de emergencia.

Así lo informó María del Pilar Cornejo, titular de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR), durante una rueda de prensa en Guayaquil.

La funcionaria explicó que las autoridades locales resolvieron esta medida, de acuerdo con los reportes del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG), que alertaron de explosiones, flujos piroclásticos, emisión de bloques incandescentes y caídas de ceniza y cascajo, las cuales principalmente afectaron el flanco occidental del volcán.

Debido al nivel de alerta, las poblaciones ubicadas en zonas de riesgo, como Cusúa y Juive (en Tungurahua); y Palictahua y Manzano (en Chimborazo), evacuaron voluntariamente a reasentamientos más seguros.

Pese a que no existe requerimiento de ayuda humanitaria, el Subsecretario de Respuesta, Felipe Bazán, recordó que la entidad cuenta con una bodega regional en Riobamba, dotada de 16 mil kits de alimentos, limpieza e higiene, así como mascarillas, gorras y bufandas. Asimismo, indicó que la población recibió hace unos meses mochilas con artículos de primeros auxilios.

Según el último reporte de la IG, la actividad del Tungurahua se mantiene en un nivel alto. Hasta las 09:00 se continuaba observando la generación permanente de una columna de emisión cargada de ceniza de 3 km de altura con dirección variable entre noreste, sureste y este.

Más temprano, a las 07:35, tres pequeños flujos piroclásticos descendieron por el sur del volcán, mientras que se escuchaban bramidos que provocaron vibraciones de ventanales hasta una distancia de 14 kilómetros.

En la madrugada, a las 02:00, se registró una explosión que generó la expulsión de material incandescente que cubrió todos los flancos del coloso y la generación de un flujo piroclástico que descendió por la quebrada de Achupashal.

El coloso, a 135 kilómetros al sur de Quito, reactivó su actividad el domingo, cuando registró cuatro seísmos de origen vulcano-tectónico, seguidos por dos explosiones pequeñas y tres grandes.

La SNGR ha recomendado tomar algunas medidas de precaución para prevenir posibles afectaciones en la salud:

Usar permanentemente mascarilla.

Usar gafas para prevenir lesiones oculares.

Limpie con frecuencia techos y ventanas y las alcantarillas de su sector.

Sellar con cinta el contorno de las ventanas. 

Mantener ventanas y puertas cerradas.

Al conducir ser prudente con la velocidad, llevar las luces encendidas y usar los limpia parabrisas sin agua.

No dar importancia a rumores.

Estar atentos a las noticias oficiales  de los COE’s provincial y cantonal y de los organismos técnicos.