Este miércoles en la sala de audiencias de la Policía Judicial (PJ),  el juez Ubaldo Macías acogió favorablemente la petición de la Fiscalía del Guayas, de  dictar prisión preventiva en contra de Danilo de Jesús Norero  Mejía, acusado de  supuesta instigación al delito.        

Norero es el supuesto propietario de un terreno en la zona conocida como “Trinidad de Dios”, en las inmediaciones de la Vía Perimetral y quien presuntamente donó parte de ese espacio para que más de 400 familias construyeran sus viviendas en el lugar. 

Según explicó el fiscal Jackson Lima, este lugar fue declarado como zona de seguridad por mandato presidencial debido a la construcción  de la subestación eléctrica  “Nueva Prosperina”, que se encuentra junto a los terrenos y que fue inaugurada este martes por el Ministerio Coordinador de los Sectores Estratégicos y por el Ministerio de Electricidad y Energía Renovable.

Norero negó las acusaciones y sostuvo que se trata de un hecho injusto, en el que fue víctima de un engaño.

“Me han acusado de que he invadido una  zona de seguridad y eso es mentira. Supuestamente el Intendente de Policía me llamó para que yo rindiera mi versión, después me llevó a Florida Norte y luego me trajo acá.

Yo solamente he donado estos terrenos a gente perjudicada por  Balerio Estacio y  José Luis Calderón, que siempre han   estafado a las personas del sector”, aseguró mientras era escoltado por dos policías en las instalaciones de la PJ.

De su parte el abogado defensor, Carlos Gómez, calificó a esta acción legal como un hecho absurdo, de la que responsabilizó al Intendente de Policía de la Provincia del Guayas, Julio César Quiñónez.

“Si Norero estuvo en el acto de la entrega de la subestación eléctrica, no  sé cómo dicen que ha estado cometiendo delito ni cómo se pudo probar la flagrancia. Él fue traído con engaños y hemos dicho que esto fue orquestado por el intendente, por Balerio Estacio y por José Luis Calderón”, sostuvo.

La suegra de Norero, Soraida Coronel, señaló  que él recibió estas tierras como parte de una herencia de su padre.
“Acusan a mi yerno de  invadir cuando él es el dueño. Su padre, Vicente Norero, le dejó estas tierras”, explicó entre lágrimas.

En el sector de Trinidad de Dios, varios kilómetros hacia adentro de la Vía Perimetral, decenas de personas se encontraban al pie de lo que hasta ayer fueron sus casas. En el sitio solamente habían escombros de caña y enseres como muebles y colchones, amontonados en diferentes lugares.  

Patricia Sánchez, una de las moradoras, narraba parte de lo sucedido este martes.

“Vinieron los policías en unos 3 camiones, solo nos dieron 15 minutos para sacar nuestras cosas y empezaron a derrumbar las viviendas. Nos tocó dejar nuestras cosas allí, amontonadas, y resguardar lo poco que nos queda”, aseguró.

Según dice, en la zona habitan cerca de 1.000 familias. Ella y el resto de habitantes de la Coop. El Sol, -como se denomina el sector- apoyan a Danilo Norero.    

“Él no nos ha vendido nada. El terreno donde vivimos fue donado. Únicamente hemos gastado en la construcción de nuestras viviendas”, dijo Jenny Gómez, otra de las afectadas por el desalojo. 

Nohemí Pinoargote, vecina de Gómez, aseguró que la noche del martes debieron pasar en vela, cuidando sus electrodomésticos. “Armamos carpas con las sábanas y así pasamos la noche”, explica. 

Los moradores de la Cooperativa son enfáticos al indicar que defienden la inocencia de Norero y que permanecerán en el lugar  hasta que la situación se regularice.