Como ya es tradición para Pepita Giler de Álvarez, cada año engalana la parte externa de su casa con la imagen del Cristo Rey, acompañada de luces especiales, arreglos florales y cortinas elaboradas especialmente para la fecha. 

“Desde el día anterior a la celebración de la fiesta del Cristo Rey, me quedo hasta la madrugada con mis hijos arreglando el altar. Luego vienen mis hermanos, amigos y demás familiares para rezar el rosario y tener un momento de unidad”, dice esta moradora de la Av. Domingo Comín y Francisco Segura, en el Barrio Cuba, en el sur de la ciudad.

Según expresa, esta es una herencia familiar que viene desde la generación anterior, pues ella también participaba de esta fiesta y de los preparativos  con su madre, quien falleció hace más de 20 años. “Tengo aproximadamente 35 años manteniendo viva esta tradición y no pienso abandonarla, pues es algo que le gustaba mucho a mi madre”, sostiene la devota mujer.

La fiesta del Cristo Rey -que se celebra el quinto domingo antes de Navidad de cada año y que precede al Adviento de la Iglesia Católica- es una tradición que aún perdura en el puerto principal. 

Las ventanas, balcones y fachadas de domicilios, e incluso negocios, a lo largo de diferentes sectores de la  urbe mostraron imágenes de Jesucristo, rodeado de flores y acompañado de las banderas del Ecuador y de Guayaquil.

Uno de ellos fue el taller Forja Center, de Kléber Baquerizo, ubicado en las calles Carchi y Huancavilca.

La imagen de Jesús rodeada de pequeños maceteros con flores de plástico y una manguera de luces -de esas que se utilizan para decorar las ventanas en la época navideña- destacaba en medio de material oxidado, residuos de hierro, sierras eléctricas y aparatos de soldar.

“Tengo un taller en donde hacemos todo tipo de trabajos en hierro forjado. Le pedimos a Dios que nunca nos falten clientes y que nos cuide, pues vivimos de esto”, indica Baquerizo.

En la parte alta, Maritza Vergara, su tía, también había colocado en su ventana  una imagen de Cristo Rey. “Antes hacía esta actividad con mi mamá, pero a ella le dio un derrame cerebral. Le pido a Dios que le dé salud”, manifiesta.

Como parte de la celebración  de Cristo Rey, la Arquidiócesis de Guayaquil realizó una misa en la Catedral Metropolitana la tarde de ayer, domingo. 

Posteriormente hubo una procesión que recorrió varias calles de la ciudad hasta llegar a su destino: el monumento del Corazón de Jesús, en el Cerro del Carmen.