Un trabajo de seguridad vial en las urbanizaciones que están a lo largo de la vía a la Costa realizará el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP).

Según informó la cartera de Estado, luego de un recorrido que la titular de ese Ministerio desarrolló en la zona,  la obra se ejecutará  en el tramo que va desde la urbanización privada Puerto Azul hasta la estación de peaje de Chongón. La construcción de cuatro retornos bidireccionales reemplazará a los 12 existentes que son unidireccionales.  

La ministra de Transporte y Obras Públicas, María de los Ángeles Duarte, anunció que estos nuevos trabajos se incorporarán al contrato de rehabilitación y mantenimiento vigente de la autopista Guayaquil-Santa Elena, que  inició en noviembre del año pasado la compañía Verdú S.A.

Los  retornos deben estar terminados en septiembre próximo, es decir, tres meses antes de que se entregue la obra principal, explicó la Ministra, quien informó que los nuevos trabajos comenzaron esta semana a la altura de la urbanización Puerto Azul, con el desbroce y trazado del primer retorno. 

El MTOP informó que la obra es  un aporte al desarrollo urbano porque esta vía, a pesar de ser una troncal estatal, atraviesa por ciudadelas que son parte de la ciudad.

“Como MTOP tenemos que velar por la seguridad de la población, tanto de las familias como de los vehículos de carga”, aseguró la Ministra.

Actualmente hay 12 retornos unidireccionales para el giro y regreso de vehículos de diverso tamaño, los cuales salen directamente a la carretera y no disponen de un carril de seguridad que proteja a los conductores cuando se incorporan al tránsito, lo cual, de acuerdo con el Ministerio del ramo,  sería la causa de algunos accidentes.

Entre la urbanización Puerto Azul y la estación de peaje hay aproximadamente 15 kilómetros (km) de extensión, a lo largo de los cuales se construirán estos cuatro retornos bidireccionales, es decir, que servirán en ambos sentidos con un particular diseño geométrico.

La idea es ampliar el ancho de la carretera con un carril más, tanto de ida como de regreso.

Cada retorno tendrá una extensión total de 500 metros, y el bulbo o cabeza del mismo será la parte más amplia, haciendo que el radio de giro de los vehículos sea cómodo y seguro.

Se creará, además, un carril de seguridad de 200 metros de protección, en ambos sentidos, para que el vehículo que ha girado pueda  incorporarse al tráfico de alta velocidad, prescindiendo del semáforo que está colocado actualmente.

Además, “se construirá una vía de servicio para que los conductores que viven en las ciudadelas no tengan que incorporarse al tráfico en un ángulo de 90 grados”, acotó la Ministra y señaló que se van a cerrar los 12 retornos unidireccionales porque son peligrosos.

El costo de cada retorno será de $250.000,  que serán sumados al presupuesto del contrato de rehabilitación y mantenimiento por resultados de la autopista, estimada en $23 millones. “Es lo que necesita esta vía para ser absolutamente segura”.