El 53% de los conductores sancionados el año pasado por la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE), por infringir las normas de tránsito, estacionó en lugares prohibidos y condujo a exceso de velocidad.

Por la primera causa fueron multados 127.281 choferes y por la segunda 104.363, esto suma 231.644 infractores al año. El total de las faltas de 2014, que abarca cinturón de seguridad, llantas lisas o carros en mal estado, ascendió a 430.000 (sin incluir a taxistas ni conductores de buses).

De acuerdo con la CTE, ningún automotor puede parquear del lado del carril derecho de las calles, salvo casos excepcionales. Tampoco en curvas, puentes, túneles y calles estrechas. Las zonas más críticas, precisó Luis Lalama, jefe del Cuerpo de Vigilancia de la CTE, son el centro (perímetro Avenida Quito, Sucre, Olmedo, Malecón y Loja) y las áreas cercanas a los centros comerciales. “Comúnmente dejan los vehículos mal estacionados en doble fila”.

El artículo 388 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) establece una penalización del 40% de un salario básico unificado ($ 136) y la reducción de 7,5 puntos en la licencia de conducir.

En cambio, la Ley de Tránsito establece que el rango moderado de velocidad para vehículos livianos, motocicletas y similares, en el sector  urbano es de 50 a 60 km/h, en el sector perimetral es de 90 a 120 km/h. El artículo 386 del COIP contempla la privación de libertad por 3 días, multa de un salario básico unificado ($ 340) y la reducción de 10 puntos en la licencia a quien exceda los citados límites.

Según Michel Doumet, director ejecutivo de la CTE, la institución ha detectado que las zonas donde se extralimitan los conductores son la autopista Narcisa de Jesús, la 25 de Julio, la vía Perimetral y la Francisco de Orellana. Por esta razón se han colocado radares, con los cuales se aplica la normativa.

Doumet destacó que dichos controles han permitido que baje el índice de fallecidos por accidentes entre 2013 y 2014. “Solo en diciembre hubo la reducción del 32% en accidentes y 23% en fallecidos”.

Entre los conductores consultados, se justifican que las infracciones son cometidas por la falta de estacionamientos o deficiente sincronización entre los semáforos.

Génesis Mosquera, de Mapasingue Este, afirma que en el centro hay pocos espacios de parqueo y, si hay la necesidad de hacerlo por 5 minutos, “toca estacionarse en doble fila”. En la Avenida 25 de Julio, en cambio, Manuel Miranda observó que los semáforos “obstaculizan el tránsito”.

Otras faltas  

Otra de las faltas recurrentes de los conductores porteños es no usar el cinturón de seguridad. Por ese motivo, se multó a 55.787 personas, es decir, el 12% del total de las infracciones del año pasado.

Infracciones aisladas fueron para los adolescentes que manejan sin licencia (1), vehículos con llantas lisas (1) y conductores que dejan niños dentro de los carros sin supervisión alguna (3).

La CTE también informó que 15.434 conductores de buses fueron citados por fallas en el chasis e irrespeto a los agentes de tránsito. Además, 743 unidades fueron suspendidas porque no daban garantías de seguridad al usuario.

Por otro lado, se llamó la atención a 911 taxistas porque no utilizaban el taxímetro y a 625 choferes que ofertaban servicio de transporte sin permisos.