Guayaquil - Machala - Esmeraldas

En la ciudadela La Atarazana, en el norte de Guayaquil, varias cuadras se inundaron a consecuencia de la torrencial lluvia del sábado. Ello le impidió a Elvira Neira y su hijo Fernando -quienes fueron de visita donde unos familiares que viven en esa urbanización- retornar a su casa ubicada en Las Acacias, en el sur de la urbe.

Obligatoriamente tuvieron que pernoctar en el norte. No hubo un taxi que se arriesgue a ingresar para trasladarlos, por temor a quedarse dañado en las calles anegadas.
Además, el servicio de energía eléctrica se suspendió por varias horas. El calor fue insoportable para los habitantes de esta zona. El fenómeno se repitió entre la tarde y noche del domingo.

Carlos Naranjo, director del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), explicó que estas lluvias obedecen a un proceso termodinámico, es decir un fuerte calor en el día y alta humedad en la noche. “Eso generó las lluvias con mayor intensidad en Durán y en la Isla Trinitaria”, explicó.

El meteorólogo aclaró que aún no se encuentran el invierno y el fenómeno El Niño durante estos días. “Al empezar la estación lluviosa es irregular. Habrá lluvias focalizadas en distintos sectores. A medida que pasa el tiempo van a ser continuas. Unas zonas tendrán más intensidad y otras menos”, puntualizó.

Naranjo expresó que cuando se presente El Niño habrá un aumento en la intensidad de las precipitaciones. “A este evento natural se lo esperaba en julio, luego se lo pronosticó para agosto y después para inicios de 2016. Se estaban presentando todas las anomalías, pero no se acopló con la parte atmosférica por cuanto los vientos alisios fueron más fuertes de lo normal”, explicó.

El titular del Instituto se refirió también a la ola de calor que se siente en varias provincias. “El incremento de la temperatura se debe a que el Sol está ubicado sobre nosotros en la línea ecuatorial de manera perpendicular. A ello se agrega la energía calórica que ha liberado el mar por estas semanas”, destacó.

De allí que las temperaturas mínimas, sostuvo, están entre los 24 y 26 grados centígrados, mientras las máximas oscilan entre los 34 y 36 grados.

Mientras tanto, en Esmeraldas, una familia cuya vivienda colapsó por la fuerza de las lluvias recibió dos kits complementarios de alimentos, 3 kits de dormitorio, uno de limpieza y uno de higiene. Los beneficiados son los 5 miembros de la familia Rivera.

El Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), en coordinación con la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR), entregó la ayuda el domingo en horas de la mañana.

Las acciones de las entidades que forman parte del Sistema Nacional Descentralizado de Gestión de Riesgos (SNDGR) posibilitaron la inmediata respuesta.

Personal técnico de la Unidad de Preparación y Respuesta de la SGR llegó al lugar para realizar el levantamiento de información inicial, en donde se detallan las necesidades primordiales que requiere la familia y algunas recomendaciones.

En la calle que conduce a la manzana B, el parque, la iglesia del Señor de la Buena Esperanza y los bloques de La Atarazana se formó un verdadero río. Foto: Henry Andrade/El Telégrafo

Dos emergencias en Guayaquil

En cuanto a reportes de emergencias directamente relacionadas con las precipitaciones, el ECU-911 de Samborondón informó que solo se receptaron dos novedades. Una de ellas fue la caída de un ceibo en el sector de Monte Sinaí y que provocó la muerte de dos personas, indicó Jorge De la Torre, coordinador Zonal de la entidad.

Mientras que la otra fue la advertencia del desplome de una pared por efecto de la lluvia en el norte de la ciudad, “pero los organismos de rescate que acudieron informaron que no hubo tal percance”.

El ECU-911 maneja 270 cámaras en la urbe porteña y a través de ellas se registraron anegaciones en 7 puntos: avenida Barcelona, Lizardo García y Calicuchima, José de Antepara y Alcedo, Pedro Moncayo y Gómez Rendón, avenida Quito y San Martín, Nicolás Segovia y Bolivia, Argentina y Leonidas Plaza. No hubo indicios de inundaciones en viviendas ni afectaciones a inmuebles causadas por el lento desfogue de las aguas, puntualizó De la Torre.

Por otra parte, el Municipio de Guayaquil realizó recorridos en sectores del noroeste, donde están identificadas 200 familias que viven en situación de riesgo.

Las propiedades de estas personas están distribuidas en 6 zonas que incluyen Nueva Prosperina y Balerio Estacio, comentó Juan Ramírez, director de Gestión de Riesgos Municipal. Las áreas no son urbanizables y  el 30% de las familias afectadas están habitando en pendientes. “No están legalizadas por el Municipio”.

Con la notificación, explicó Martínez, los moradores deben acercarse a las dependencias del  Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi) para solicitar una reubicación.

También se procedió a la inspección de los árboles que están en peligro de desplomarse. Se detectó un ceibo con las raíces expuestas en una ladera, ubicado a pocos metros donde cayó otro en Monte Sinaí.

Gilberto Guzmán, jefe de operaciones de la Dirección de Áreas Verdes del Cabildo, afirmó que se procederá a la poda de las plantas que representen riesgos para los habitantes “tanto en el sur como el norte”. Cuadrillas municipales se mantendrán en recorridos para identificar zonas vulnerables.

Los habitantes han recibido una notificación para que abandonen estos asentamientos. En tanto en El Oro, el último fin de semana hubo ligeras lluvias en varios cantones.

Los aguaceros no causaron daños graves, pero sí provocaron pequeños derrumbes en la vía Pasaje- Atahualpa- Zaruma, en la zona alta de la provincia. La llovizna caída en Machala causó inundaciones temporales en los sectores periféricos.

Las primeras precipitaciones del año pusieron en alerta a los cabildos, que han dispuesto la ejecución de sus planes de contingencia. (I)

DATOS

Durante la noche y madrugada del sábado resultó imposible conseguir un taxi para movilizarse en Guayaquil. Muchos conductores prefirieron quedarse en sus casas por temor a que se averíen los carros.

Ni siquiera las cooperativas como Río Guayas, Ivan Car o Samboroncar atendieron las llamadas de ciudadanos que requerían de alguna unidad. Hubo personas que llamaron con insistencia a estas compañías, pero nadie les contestó.

Los pocos conductores, en su mayoría informales, que se arriesgaron a trabajar la noche del sábado subieron hasta $ 2 los valores habituales de las carreras. Así, de La Atarazana a la Alborada, en el norte de Guayaquil, un flete costó $ 5, cuando se paga regularmente $ 3. Las unidades de la Metrovía que circularon por el centro provocaron olas que remecieron a los autos más pequeños.

En contraste con diversos puntos del país, en que las lluvias fueron la tónica del inicio de año, en Manabí no se registraron mayores precipitaciones. El ECU-911 informó sobre un ligero chubasco en la vía Paján-Guayaquil, en el sur de la provincia.  

En las redes sociales los manabitas se quejaron del extenuante calor. En Portoviejo, la temperatura registrada al mediodía de ayer fue de 32°, mientras que en Manta de 30°.

Debido a las altas temperaturas, alrededor de las 13:00 de ayer se suscitó un incendio forestal en el cerro Canta Gallo, recinto El Galán, en Jipijapa. En el sector se registraron más de 33° centígrados. La emergencia fue controlada por los bomberos del cantón.

Entre las alternativas para aplacar el calor, los manabitas optaron por acudir a la playa, balnearios de agua dulce y piscinas. (I)

Las zonas periféricas de Machala resultaron afectadas con lodo y piedras tras las leves lloviznas de las últimas horas. Foto: Fabricio Cruz/El Telégrafo

La temperatura varía en 3 zonas de región centro

Las condiciones climáticas en las provincias de la Sierra centro se mantienen variables. Las madrugadas y mañanas son nubladas y frías, pero desde las 10:00 hasta las 17:00 se transforman en días soleados y calurosos.

En Latacunga, la temperatura ha ascendido de 9 a 22 grados, en Ambato de 10 a 23 y en Riobamba de 11 a 24 grados, según reporta el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi).

Por estos factores, los habitantes de la región optan por salir de casa en las mañanas con bufandas y chompas gruesas que se usan sobre las camisas, camisetas o blusas. Sin embargo, al mediodía son dejadas a un lado estas prendas, ya que la temperatura se eleva y hay sol.

Solo unas horas antes del anochecer, ambateños, latacungueños y riobambeños vuelven a utilizar las prendas que proporcionan calor. Además, no solo que baja la temperatura, sino que también hay viento. Estos cambios atmosféricos empiezan a causar resfríos en niños, jóvenes y adultos.

En las farmacias de la capital tungurahuense, los dependientes reciben a decenas de personas que buscan antitusígenos y antigripales para aliviar el catarro. Otros, en cambio, apelan a los productos naturales y yerbas que adquieren en los centros de abastos con el fin de aminorar los síntomas de la gripe. Las personas de la tercera edad son las que más prefieren las infusiones. (I)

Activado el COE en Santa Cruz por inundaciones

Fuertes lluvias cayeron en la isla Santa Cruz (Galápagos) y afectaron la principal vía de la isla (Av. Baltra),  que la atraviesa de norte a sur (44 km). El Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos (CGREG) informó que mantiene personal trabajando en toda la zona y se moviliza equipo caminero disponible para habilitar las vías.

A las 19:00 de ayer se activó el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) local en las instalaciones del Gobierno Autónomo Municipal de Santa Cruz. El ECU-911 coordinó con el Municipio y el CGREG la utilización de maquinaria en los sectores de Bellavista y Guacatal, cuyas carreteras se inundaron.

En la capital azuaya aún no caen precipitaciones similares a las que soportó el Litoral el fin de semana.

Desde hace varias semanas, el caudal de los ríos sigue a la baja y no se avizora que mejore en las próximas horas.

Según los técnicos del Departamento de Investigación y Monitoreo de la Empresa de Telecomunicaciones, Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Cuenca (Etapa), el nivel de los afluentes ha descendido considerablemente.

El río Tomebamba, que tiene un promedio de 6 metros cúbicos de agua por segundo, ayer apenas pasaba en su lecho 0.19 metros cúbicos de agua por segundo.

Lo mismo sucedía con los demás afluentes que atraviesan la urbe.

El Yanuncay, este lunes tuvo un caudal de 0.9 m3/seg, mientras el Tarqui registró 1.72 m3/seg y el Machángara 1.36 m3/seg.

La dependencia municipal no registró aguaceros en las últimas 48 horas, tanto en la parte alta como en la urbana.

A pesar de esa situación, Etapa garantizó el despacho del líquido a los ciudadanos.

“Los tanques que abastecen de agua potable a la ciudad no tienen problemas”.

Mientras tanto, los incendios forestales aumentaron en la última quincena de diciembre.

De acuerdo al coronel Oswaldo Ramírez, jefe del Cuerpo de Bomberos, en el último feriado se registraron 19 siniestros en diferentes sectores del Azuay.

El uniformado dispuso que los 300 voluntarios estén listos para atender la emergencia. (I)