El pasado mes de abril, Cristiano Ronaldo arrojó al suelo un celular de un aficionado del Everton y esta semana se confirmó que la Policía Británica amonestó al portugués por tal hecho.

Se trata de una “advertencia condicional” que las autoridades usan en contra de personas que no tienen antecedentes por delitos menores, según la página web oficial del Gobierno de Reino Unido.

En este caso, Cristiano Ronaldo debe admitir que cometió una infracción y con esto evita ir a juicio e iniciar un proceso penal que quede fichado en sus antecedentes penales dentro del territorio británico.

En abril de 2022, un aficionado del Everton intentó tomar una foto de Cristiano Ronaldo, sin siquiera acercarse a él, pero cuando el jugador pasó por delante, golpeó la mano del joven hincha y botó su celular al suelo.

El pasaje aumentó en cuanto a relevancia cuando se hizo público que el joven hincha es, según su propia madre, “autista y padece dispraxia”.

Posteriormente se supo que Ronaldo presentó disculpas e invitó al joven a un partido en Old Trafford, pero eso no le libro de los ojos de las autoridades.