“¿Quién no es enamoradizo?”, suelta Iván Paredes. “Todos”, responde él mismo, acompañado por otra interrogante de su compañero Andrés Acuña: “¿pero qué sucede cuando uno de ellos ya sobrepasa ese límite de enamoramiento?”.

Ninguno de ellos dice quién de los 10 miembros de Papá Changó tiene esa conducta de la cual se aprovechan para hacerle todo tipo de bromas.

Y es que para ellos lo que pasa en la sala de ensayo se queda allí, aunque eso no es impedimento para crear una canción que relate la historia de su enamoradizo compañero de banda.

Ocurrió en un ensayo en Quito, casi un ‘jamming’, es decir esas improvisaciones al tocar sin ningún tipo de apuro, más bien relajadas (incluidas las bromas al más enamoradizo).

Fue cuestión de un par de sesiones más en el estudio para que surgiera ‘No quiero enamorarme nunca más’, que suena a pura cumbia, con unos coros que -a ratos- recuerdan al pop latino de los guayaquileños Los Intrépidos.

Y lo de la cumbia parece nuevo para sus fans, acostumbrados al reggae con fusión latina que siempre ha propuesto Papá Changó.

No obstante, Acuña, mejor conocido como André T, recuerda que canciones como ‘Caminante’ tienen una base de bajo propia de la cumbia, aunque con sonidos de instrumentos más inclinados hacia el ska y vocalización de reggae, al estilo de Los Pericos, de Argentina.

Incluso, meses antes, Papá Changó reversionó ‘Silueta’, uno de sus temas. Ahora suena como una balada rock, a través de la guitarra eléctrica de Darío Castro, quien participó del ‘unplugged’ con el que la banda celebró diez años de carrera en diciembre pasado.

Y es que sus miembros tienen influencias de todo un poco, desde los Beatles y Jimi Hendrix, pasando por Los Fabulosos Cadillacs, Los Pericos, Paralamas, UB40 y más.

“No quiero enamorarme nunca más’ es una cumbia que aborda el desamor con alegría y lírica picaresca”, describe Paredes, a quien le dicen ‘Diablo’ en la banda que la semana pasada estuvo de visita en Guayaquil, pero solo con 5 de sus 10 integrantes.

Cuentan que tomaron con humor las experiencias de su compañero enamoradizo, a través de versos como “tal vez/ yo siempre me enamoro sin querer/ dejando ilusiones por doquier/ pero yo sabía al final que soy yo el que iba a perder...”.

“La canción tiene que ver con que muchos hombres hacen de todo para conquistar a una mujer, pero al final les sale el ‘tiro por la culata’.

Y el personaje finalmente aprende su lección y decide no enamorarse más”, cuenta Andrés T sobre la cumbia que tiene un apeo, después del coro y un solo de saxo ejecutado por Danny Hidrobo, primo del jazzista Christian Hidrobo.

El argentino Mario Siperman, tecladista de Los Fabulosos Cadillacs, nuevamente colabora con Papá Changó. Además de tocar, también masteriza la canción. Él prácticamente es el miembro 11 del grupo.

Los otros, además de Andrés T y ‘Diablo’, los vocalistas, son los hermanos Mike y Jeff Aranda, Andrés, Dennis y Nacho ‘Cholo’ Granda, Milton ‘Ekeko’ Mora, Alexis ‘Matico’ Proaño y José Andrade.

“A Siperman lo conocimos en el QuitoFest de 2006 cuando vinieron Todos tus muertos. Él siempre nos vio como colegas y por eso no nos cobra. Desde entonces siempre ha colaborado con nosotros.

En ‘No quiero enamorarme nunca más’ también participa Carlos ‘Pantera’ Pizarra, colombiano que reside en el país”, agrega Andrés T.

Papá Changó anuncia la grabación del video de ‘No quiero enamorarme nunca más’, que será animado y en 3D.

Ya producen el nuevo disco y alistan una gira de conciertos por Guayaquil, Quito, Cuenca, Riobamba, Ibarra, Santo Domingo de los Tsáchilas y Puyo. (I)