Existe una escena clave en la tercera parte de la saga ‘Back to the future’. Clara Clayton (Mary Steenburgen) le confiesa su pasión por la astronomia y la literatura de Julio Verne a Emmett Brown (Christopher Lloyd), en pleno oeste de 1885.

Quizás eso explique aún más el origen de la trilogía ‘Back to the future’, si se considera la obra de Verne en ‘De la tierra a la luna’ o ‘Viaje al centro de la tierra’. Verne es aún considerado como un adelantado para su época.

No obstante, ‘Back to the future’ (1985) surgió de una variedad de influencias que tuvieron Bob Gale y Robert Zemeckis, quien dirigió las tres cintas (las otras se estrenaron en 1989 y 1990).

Entre los referentes de ambos constan: ‘It’s a wonderful life’ (1946), de Frank Capra; ‘A Christmas carol’, de Charles Dickens (que curiosamente Zemeckis adaptó en 2009 con tecnología para animación de captura de movimiento). 

Pero las principales influencias para redactar el guión fueron las historietas de DC Comics, la serie de los 60, ‘Dimensión desconocida’, y la película ‘The time machine’ (1960).

‘Back to the future’ inmortalizó la imagen de Marty McFly, el personaje que encarnó el ahora cincuentón Michael J. Fox.

Sin embargo, él no estuvo en los planes iniciales de la película original que tuvo a Steven Spielberg como productor. Más bien habían citado al cantante canadiense Al Corley (quien ya tenía experiencia actoral con la serie ‘Dinastía’); C. Thomas Howell y Eric Stolz.

Para entonces Fox participaba en la comedia televisiva ‘Family ties’ y en la película ‘Teen wolf’ (Lobo quinceañero). Por eso no había aceptado la propuesta.

Stolz audicionó, pero los productores percibieron que no encajaba y tentaron a Fox, quien finalmente accedió. De hecho, los seguidores de la trilogía no conciben a otro Marty McFly, que no sea Fox, pese a que se rumorea una cuarta parte, pero el actor padece de parkinson desde hace más de una década y ya no puede interpretar a ese personaje.

‘Back to future’ relata la historia de Marty, un adolescente de 17 años que sueña con ser un famoso guitarrista y tiene una novia llamada Jennifer Parker (interpretada por Claudia Wells y en las otras dos películas por Elisabeth Shue).

Vive en su casa de Hill Valley con un padre fracasado, de apariencia ‘nerd’, su extremadamente conservadora madre y dos fastidiosos hermanos mayores. A diferencia de ellos, Marty no se deja amedrentar por nadie, especialmente cuando le dicen “gallina”, algo que lo meterá en líos.

Es amigo del doctor Emmett Brown (Lloyd), un científico que inventó un carro (modelo De Lorean) que viaja al futuro, a través de un condesador de flujo, 21 jigawatts de energía, una velocidad terrenal de 88 millas por hora y plutonio.

‘Doc’, como Marty llama a Brown, huye de los libios a quienes robó el plutonio, pero es acribillado afuera de un centro comercial. Marty escapa, pero dentro del De Lorean, que alcanza las 88 millas y desaparece después de que él sin querer fijara la fecha 25 de octubre de 1955 en el tablero.

Retrocede 30 años en el tiempo y como no sabe cómo volver, busca al ‘Doc’ más joven, pero se encuentra con su padre George McFly (Crispin Glover), que entonces era un ‘nerd’ adolescente, abusado por Biff Tannen (Thomas F. Wilson).

Debe hacer que su padre se enamore de Lorraine (Lea Thomson). Si no lo consigue corre el riesgo de que no se casen y por ende que Marty no nazca (y muera el que viene de 1985).

De vuelta al presente, Marty encuentra que su padre es ahora un exitoso escritor de ciencia ficción y un galán con Lorraine. Biff, en cambio es un empleado domesticado en una película famosa también por su banda sonora, a cargo de Alan Silvestri y Huey Lewis con su ‘Power of love’.

Zemeckis, Gale y compañía percibieron el éxito de la película desde el principio al punto de que dar pie a su secuela con el hecho de que ‘Doc’ busca a Marty y Jennifer para llevarlos al año 2015 porque sus hijos están en peligro.

Esa es la trama de ‘Back to the future II’, en la que se añade el hecho de que por un almanaque que Marty compra, su presente normal se convierte en uno alterno y violento (ahí la referencia con ‘It’s wonderful life, de Capra’).

Apenas se había estrenado la secuela, mientras que los productores iban por la posproducción de la tercera película, con el pretexto de que accidentalmente ‘Doc’ viaja a 1885, pero su vida corre peligro y envía una carta a Marty para que lo rescate.

‘Back to future III’, que tiene a ZZ Top en su banda sonora, traslada a sus protagonistas hacia el oeste y eso justifica aquella confesión entre Emmett Brown y Clara Clayton, acerca de su pasión por Julio Verne.