El trasvase Daule-Vinces (Dauvin) beneficia actualmente a 70.000 hectáreas (ha) de cultivo de las 160.000 que tiene como capacidad, es decir, con una cobertura de 43% de lo previsto para el proyecto.

Es el balance compartido por delegados de la Empresa Pública del Agua (EPA) que esta semana realizaron un recorrido en la zona junto a funcionarios de la Empresa Coordinadora de Empresas Públicas (Emco).

La razón por la que aún no se alcanza la cobertura proyectada para la infraestructura, inaugurada en 2015, es la falta de trabajos complementarios y canales secundarios, explicó Henry Cáceres, gerente general de la EPA.

“Tales estructuras son corresponsabilidad de los gobiernos autónomos descentralizados de Guayas y Los Ríos”, afirmó Cáceres.

Para concretar esta parte, se prevé reuniones con los respectivos funcionarios.

La visita de los delegados de la Emco y la EPA también fue con el objetivo de conocer la operación de Dauvin y levantar los informes que permitan la optimización de los recursos asignados por el Estado. Anualmente, se requiere de $ 50 millones para el mantenimiento de los 14 sistemas de riego que existen en el país.

Cáceres dijo que se desarrollará un nuevo modelo de gestión por cada proyecto hídrico. Se comenzará por la regularización de los sectores beneficiados los cuales por ahora solo están catastrados.

“Estamos haciendo un barrido de los sistemas, entonces, hay un modelo de cultura de pago por el sistema, sea para el uso y aprovechamiento, o para el mantenimiento y operación”, mencionó el funcionario al ser consultado por la cifra de zonas que serán legalizadas en los 14 sistemas de riego.

También acotó que existe apertura por parte de los agricultores para cancelar un valor por litro de agua utilizado en sus cultivos.

La tasa por cancelar estaría entre $ 0,01 y $ 0,45, de acuerdo a los tipos de uso estipulados por la Secretaría Nacional del Agua (Senagua).

En el marco de esta gestión, la EPA emprendió una campaña masiva de regularización y concienciación sobre el adecuado uso de los recursos hídricos.

Por ahora, manifestó Cáceres, se trabaja con la Emco para revisar los avances técnicos y presupuestarios del trasvase Dauvin “acorde a la planificación que se hizo, que se renueva por el tema de austeridad en el mantenimiento y operación”.

Por otra parte, la EPA solicitó un control interno en todas sus instancias luego de que la fiscal Diana Salazar, dentro de las investigaciones realizadas sobre Odebrecht, detectara un aparente sobreprecio de 67% respecto del valor contratado originalmente para la construcción del trasvase Dauvin. “Hay una orden judicial de paralización, a la empresa todavía se le debe algunos rubros que no se pueden pagar por la orden judicial... Eso lo determinarán la Fiscalía y Contraloría”, aseguró Cáceres.

Traspaso de competencias a cartera de Ambiente

La EPA se mantendría como empresa pública, bajo el marco legal de tales entidades, y no será afectada por la fusión de la Senagua con el Ministerio del Ambiente dispuesta por el presidente de la República, Lenín Moreno, como medida para recortar los gastos públicos.

Cáceres recordó que la dependencia a su cargo se rige por la Ley de Empresas Públicas. “Asumiría, entiendo yo, el Ministerio del Ambiente y Agua (supervisión de EPA). Nosotros seguiríamos como empresa pública, nosotros controlamos 14 sistemas, somos la parte responsable y medular de los sistemas de operación y mantenimiento de toda la gestión del agua”, manifestó Cáceres.

En el recorrido por el trasvase Dauvin también estuvo presente Carolina Pesántez, gerenta general de Emco, aunque no ofreció declaraciones sobre la situación de las empresas públicas. (I)