Los flujos comerciales entre Ecuador y la Unión Europea (UE) se incrementaron 3,8% desde que entró en vigencia el Acuerdo Comercial Multipartes en 2017.

Según datos proporcionados por la sección de Comercio de la UE en Ecuador, los intercambios bilaterales crecieron 21% aquel año. Las exportaciones de Ecuador aumentaron 12% frente a 2016, mientras que las importaciones desde la UE se elevaron en un 25%.

Para 2018 el flujo comercial bilateral aumentó 3,1%. Las exportaciones crecieron solo 2% debido a una reducción en las ventas a la UE de los productos principales de exportación como el banano, el camarón y las rosas. Las importaciones desde la UE aumentaron 11%.

La situación en 2019 fue diferente: el comercio registró un incremento marginal de apenas 0,16%. Las exportaciones de Ecuador hacia la UE cayeron 1,57%, mientras que sus importaciones crecieron 2,46%.

Pese a esto, asegura Inmaculada Montero Luque, jefa de la Sección de Comercio de la UE en el país, Ecuador sigue manteniendo un superávit comercial de 604 millones de euros ($ 658 millones) en 2019.

El acuerdo comercial permitió, en primer lugar, fortalecer las exportaciones de los productos tradicionales como el banano, el camarón, el cacao, el atún y las flores.

Mónica Maldonado, directora ejecutiva de la Cámara Ecuatoriana de Industriales y Procesadores Atuneros (Ceipa), asegura que si no hubiera el acuerdo la exportación de atún a la UE debería pagar un arancel del 24%. “Con el convenio se renovaron las preferencias arancelarias que ya teníamos, lo que nos ayudó a mantenernos en ese mercado. Llegar ahí no es fácil, se requieren condiciones especiales”, asegura Maldonado.

Según datos de la Ceipa, Ecuador produce alrededor de 500.000 toneladas al año en lomos precongelados y conservas de atún en vidrio y funda, que representa unos $ 1.300 millones. Cerca del 60% se exporta a la UE.

La alianza también ayudó a diversificar las exportaciones ecuatorianas. En 2017 ingresaron 200 nuevos productos a la UE y en 2018 alrededor de 50. Algunos de estos son jugos y concentrados de papaya, derivados de frutas y vegetales (polvo), grasas y aceites de pescado, solubles de café, suplementos alimenticios, flejes de madera, maíz dulce, maní, aguardiente y conservas de arenques.

Aparte de los productos tradicionales de exportación, en 2019 tuvieron buena acogida en el mercado europeo las frutas no tradicionales como piña, aguacate y papaya.

Daniel Legarda, presidente ejecutivo de la Federación Ecuatoriana de Exportadores, destaca que actualmente 612 productos se exportan a la UE. Hay 1.181 empresas exportadoras a ese mercado, el 65% son mipymes. En total, en 2019 se exportaron $ 3.108 millones.

Por otro lado, los productos europeos que más demanda tienen en Ecuador son los bienes de capital, como la maquinaria mecánica, seguido por productos farmacéuticos, vehículos, maquinaria eléctrica y tranvías/ferrocarriles.

Según Montero, el Fondo Monetario Internacional proyecta un crecimiento global de las exportaciones ecuatorianas del 2,5% y una caída de las importaciones de -2,1% para 2020.

“Sin embargo, se espera que las reformas que está emprendiendo Ecuador, tanto en el campo tributario como con la ley de emprendimiento, entre otras, y la apertura de mercados, influyan positivamente en el fortalecimiento del comercio externo y en la diversificación de la oferta exportable”, explica Montero.

A criterio de la representante de la UE, la industria ecuatoriana está aprovechando los beneficios del acuerdo comercial. Algunos de ellos son las micro, pequeñas y medianas empresas. Estas últimas incrementaron sus productos exportados de 360 a 480 entre 2016 y 2018.

Montero agrega que la UE trabaja con una financiación de 10 millones de euros ($ 10,8) otorgados al Gobierno Nacional y al sector privado, como la Federación Ecuatoriana de Exportadores, que les permitió apoyar a cerca de 300 mipymes en todo el país. Por ejemplo, se ha logrado la internacionalización de al menos 20 proyectos con componentes asociativos en el país con productos como: quinua, panela, flores, cacao, plátano, hortalizas, maní, madera, entre otros.

Desde que entró en vigencia el acuerdo comercial el 99,7% de los productos agrícolas ecuatorianos y el 100% de los productos de pesca o industriales han gozado de un acceso al mercado de la UE, libre de aranceles, excepto el banano.

Este 2020 el banano ecuatoriano tendrá el mismo arancel de 75 euros ($ 81) por tonelada, al igual que sus países vecinos, lo que le permite competir en condiciones similares en el bloque europeo con el resto de países productores y exportadores de este producto.

Por otro lado, la desgravación arancelaria para los productos industriales provenientes de la UE continuará en este 2020. El acuerdo establece cinco años de desgravación para madera, textiles, confecciones, medicinas y maquinaria, como válvulas, trituradoras, balanzas, lavavajillas y máquinas para prensar.

Siete años para pinturas, productos de aseo personal, accesorios para baños, porcelana y cerámica y vehículos. Y 10 años para calzado, neumáticos, manufacturas de plástico, vidrio, entre otros. En el caso de los vehículos, por ejemplo, se reduce el 5% cada año durante siete años.

A criterio de Legarda, para aprovechar más el acuerdo comercial con la UE se debe mejorar la competitividad interna del país, así como la promoción de los productos ecuatorianos en todos los nichos europeos posibles. (I)