Como parte de la estrategia para incrementar la compra de cocinas de inducción en el país, el Gobierno  estableció nuevos incentivos. Uno de ellos es ampliar de 3 a 6 años el plazo de financiamiento para la adquisición de los artefactos y las ollas para cocinar con electricidad.

El anuncio lo realizó el gerente del Programa de Cocinas de Inducción, del Ministerio de Electricidad y Energía Renovable (MEER), Vladimir González, tras participar en el Foro de Cocción Eficiente que se cumplió en la Asamblea Nacional.

En el foro, el funcionario expuso sobre los beneficios que obtendrá el país al cambiar el uso de los cilindros de gas por electricidad.

Además, indicó que “es decisión del presidente de la República, Rafael Correa, que los beneficiarios del Bono de Desarrollo Humano (BDH) y de la tarifa de la dignidad (consumo hasta 110 kilovatios en la Sierra y 130 kw en las demás regiones) reciban las cocinas y el juego de ollas completamente gratis”. Aseguró que los artefactos a entregarse serán de 4 zonas (quemadores).

González manifestó que él fue parte del equipo técnico que viajó a China con el presidente Correa a inicios de año, en donde visitaron a los principales fabricantes de cocinas de inducción del país asiático, de donde Ecuador tiene previsto importar 500.000 artefactos, que serán los que se entregue a los beneficiarios del BDH y de la tarifa de la dignidad.

Señaló que el monto de la inversión estaría entre los $ 150 millones y $ 180 millones, dependiendo de las especificaciones y del precio final que tengan las estufas. “Los fabricantes nos han ofrecido que, si se hace la negociación -a más tardar esta semana y se pone la orden de compra-, el primer contingente podrá arribar al país en abril de este año. Esperamos tener no menos de 300.000 cocinas importadas para esa fecha”, indicó González.

Subsidio de 100 kilovatios

El gerente del Programa de Cocinas de Inducción informó que los 100 kilovatios que entregarán (80 para cocción y 20 para calentamiento de agua) serán gratis hasta 2018. “A partir de ese año se empezará a cobrar esos 100 kilovatios, pero solamente a $ 0,4 el kilovatio/hora (kw/h), cuando la tarifa normal es $ 0,9 el kw/h, con lo cual los 100 kilovatios costarán $ 4”, aseguró.

González aseveró que el Gobierno decidió mantener el subsidio al gas para los ciudadanos que no tengan aún servicio de energía eléctrica, “que en la actualidad es un porcentaje muy bajo”.

Según la última información del Ministerio de Electricidad, el estimado de cobertura de energía eléctrica a diciembre de 2013 era de 95,77% en el país. Información que consta en el Plan Estratégico Institucional 2014-2017.

Entrega de cocinas

Hasta la fecha se habrían adquirido 60.000 estufas de inducción, según el último sondeo realizado por MEER. Mientras que hasta  la noche del 27 de enero de este año, 147.000 familias se han registrado para la adquisición de los artefactos.

Al respecto, el gerente del Programa de Eficiencia Energética de la Presidencia de la República, Enrique Arosemena, indicó que, para este año, la meta del Gobierno es colocar un millón de cocinas de inducción en los hogares ecuatorianos.

Arosemena agregó que el programa se mantiene y tendrá un mayor impulso para que la gente se meta más en este proceso de cambio  que es un ‘ganar-ganar’ para todos; para el Estado, porque se ahorrará $ 800 millones del subsidio al gas licuado de petróleo (GLP); y para los ecuatorianos, porque tendrán una cocción más eficiente y segura.

Ciudadanía apoya

María Cadena, madre de 2 hijos, quien gana el salario básico ($ 354), sostuvo que ella necesita una cocina con horno, ya que hace comidas en sus tiempos libres y lo necesita para los postres. “Los 3 años que me daban para financiar la nueva cocina no eran suficientes, considerando lo poco que gano y tengo que mantener a mis hijos. Ahora creo que las cuotas serán más bajas y podría comprar la cocina”, manifestó Cadena.

Por su parte, Camila Catota, ama de casa, y cuya familia se mantiene con el sueldo de su esposo ($ 420 al mes), dijo que con el anuncio de que habrá más plazo para pagar, “se está animando a comprar la cocina”. Aún tiene dudas, “porque hay gente que dice que las estufas de inducción no son tan buenas para cocinar”, dice la señora, quien es madre de un hijo que cursa el séptimo año de básica.