“Profesor,         ¿desea una   taza   de   café?”,    le pregunta  el  jefe  de   prensa de la Ecuafútbol al técnico  Reinaldo Rueda. “Sí, lo necesito”,   le   responde  el estratega  con la urgencia de   quien busca una fuente de energía adicional  para desvanecer el cansancio.        Son  las       11:30 y  es  lunes.      Rueda    luce   inquieto, espera la llamada de su esposa, el motivo trasciende lo estrictamente familiar:  ella debe  enviarle los   documentos necesarios para obtener la visa para Reino Unido,  ya  que  a  finales de este mes viajará a Londres    junto a la Selección para jugar contra Australia  el  primer partido  de preparación   previo al  Mundial de Brasil.          Se queja  porque    la  señal de su celular se pierde por momentos.  Hasta que se restablezca  revisa   varios documentos que  la  FEF     le     acaba   de entregar. “Uno  descansa   cuando está en la cancha,   entrenando”,    exclama antes de pedir disculpas   por el retraso que eso  provoca.               Rueda  ocupa  la  oficina  presidencial  FEF.  En  las paredes   hay  reconocimientos a la institución y a la Selección, recuerdos de viajes y trofeos, pero lo que más destaca  es  una figura de porcelana de    Christian  Benítez  sobre  una  de   las mesas centrales del salón.        Rueda   está    en    Guayaquil   para  observar y  evaluar  a algunos seleccionados  que actúan   en Barcelona y Emelec  y para dar   una charla de motivación a los trabajadores de una   empresa  de la ciudad.         ¿El sistema del   torneo  local  se ajusta a la planificación del cuerpo técnico? ¿Existió malestar de su parte por la modalidad?      La idea era  acortar  el torneo,   tratar de reducir algunas jornadas  y tener los espacios para reunir al grupo, sobre  todo   a  los  que juegan en   el  torneo  local.     ¿Eso lo había conversado con la dirigencia? Sí, eso estaba  proyectado desde hace tres años, desde que llegamos a manejar el programa macro.    ¿Y qué pasó, hubo falta   de comunicación en enero?    No, sigo sin  entender  qué  pasó  y por qué se le dio prioridad al  torneo  local;  la Copa Libertadores nos quitará  una semana de trabajo.   Queríamos reunir el grupo  en enero, unos 10 ó  12  días  y  no  se pudo  cumplir esa primera parte del plan.  Ahora  buscamos  espacios para tener un periodo, todo depende de  cómo les vaya a los clubes en los torneos   internacionales; por ahora   pensamos tener un espacio en abril, porque   este mes tendremos  solo   4 días  para  entrenarnos.    Conocemos que   existe   una   base  de 20 jugadores que irán  al Mundial,  ¿se está pensando en  convocar  algún futbolista  que  no  haya   participado del proceso?         La lista la  integrarán  los   jugadores que lograron la clasificación  al Mundial y los   que han  participado en las  convocatorias anteriores.        Y si en estos meses  destaca alguno que no  estuvo en  el proceso, ¿lo convocaría para el Mundial?    Será difícil convocar  a quien no haya  estado en el proceso.  ¿Cómo   ha ajustado entonces esa planificación?  Tenemos solo una reunión en marzo y   esperamos  realizar  otra en abril; dependiendo de la disponibilidad de los equipos que están en Copa Libertadores (Independiente y Emelec)     tendremos una semana para jugar un  partido internacional o hacer      entrenamientos.  En mayo   tendríamos  una reunión  de 4 días. ¿Es poco tiempo? ¿Y usted qué opina  (sonríe)? Con la responsabilidad tan grande de un Mundial son cuatro días en marzo y cuatro días en mayo, y después ocho en junio y ocho más en Brasil.     A corto  plazo,  ¿cuál es  la   planificación  hasta   la   convocatoria del 24 febrero?             Por ahora trabajar inmensamente en el tema de las visas para   Reino Unido; en este sentido  hay muchas  exigencias  por parte de la   Federación. Mantendremos  el  seguimiento que hemos venido haciendo, en lo futbolístico,  a los jugadores. Necesitamos  saber con cuántos hombres  contamos, algunos que están en nuestra lista   no están sumando minutos y otros sí. Aprovecharemos este   primer llamado para analizar eso. Tendremos     dos unidades de entrenamiento, viajamos el 1 de marzo a Londres,   trabajamos  2   y   3, el 4 reconoceremos  la  cancha, jugamos el 5 y regresamos.   Sobre los partidos amistosos, ¿están acorde a lo que  pidió? Todos  los   rivales  tienen  gran nivel.  Australia,  Holanda,  México  e   Inglaterra  son selecciones con  características de juego  diferentes, pero    todas   tienen mucha jerarquía en el fútbol mundial.      ¿Qué trabajo se  está haciendo con los clubes, está conversando con los  técnicos?        Estamos haciendo la evaluación directamente en la competencia. Antes sí  hemos hecho ese contacto (con los técnicos), pero por ahora estamos haciendo la observación directa en el torneo.           Los DT Jorge Sampaoli,  de Chile, y Miguel Herrera, de México, realizaron una gira por varios países para verificar cómo están sus potenciales seleccionados. ¿Hará usted lo mismo?   Sí, esa  es  la  idea. Lo haré   después del juego ante Australia.  Me interesa más ir a  México,  donde tenemos un buen porcentaje de jugadores. Hay que  hacer una observación detallada  de los  jugadores que actúan en  ese país, mirarlos en sus trabajos y compartir un poco con sus entrenadores. Tenemos unas fechas tentativas para viajar, de acuerdo con los partidos  de la Liga Mexicana,  pero   estamos confirmándolas.         ¿Qué tipo de análisis y  seguimiento se le  está  haciendo a   las selecciones rivales?    Ya  estamos  recopilando  todo  el material, revisando los videos de los juegos en los que lograron la  clasificación.   Estaremos al tanto también  de  los   partidos amistosos que disputen hasta  antes del inicio del Mundial.    En junio de 2013 usted dijo que quien jugaba en el fútbol de Emiratos Árabes se alejaba de la Selección. ¿Felipe Caicedo se  alejó  del equipo cuando decidió jugar en el Al-Jazeera?       No, son dos casos totalmente diferentes. Segundo Castillo  estaba en México y se fue para Arabia y Felipe (Caicedo) estaba en Rusia y se va a Emiratos Árabes a jugar. No se puede comparar, son dos momentos diferentes, son dos tiempos diferentes. Entre estar en Rusia sin jugar y estar en Emiratos Árabes jugando es más saludable lo segundo y muy positivo para Felipe.   ¿Más preocupante fue lo de Segundo Castillo? Tampoco, porque llegó a un fútbol que es competitivo, a un club que es grande y que hay que hablar de las cosas positivas; por fortuna está adaptado, está teniendo buena respuesta. Estamos en contacto con él, y a pesar de toda la exigencia, ha hecho un buen torneo. ¿Con Felipe conversó? Antes de dar el paso (dejar Rusia), la semana previa conversé con él. Después han sido mensajes cortos de su participación, de los partidos que ha jugado. ¿Cómo se comunica con ellos? Vía telefónica o whatsApp que es de una forma muy directa. ¿Caicedo superó la lesión en el muslo? Es un problema  muscular, pero ahora que está jugando más seguido nos vamos a dar cuenta si está bien. Él se siente bien y que siga cuidándose. ¿Usted recomendó a Édison Méndez   para que  juegue en  el Santa Fe de Bogotá, pensando en una eventual convocatoria para el Mundial?   Esa fue una negociación que se dio cuando yo estaba fuera del país, incluso la noche antes que Édison (Méndez) viajara  a Colombia conversé con él y me pidió referencia del club,  del fútbol  y de  Bogotá como ciudad. Es muy positivo que llegue a un club donde estará en competencia   internacional, muy motivado y esperamos que siga por ese camino. ¿Tiene posibilidades de llegar a formar parte de la Selección que irá a Brasil? No me gusta particularizar, son decisiones que se tomarán en el colectivo (cuerpo técnico); él está haciendo su trabajo y nosotros la evaluación.  ¿Es verdad que en su momento conversó con Walter Ayoví para ubicarlo en otra posición? Sí, lo hemos intentado. Estamos buscando alternativas, sabemos que él en su club a veces hace muchos minutos en una posición diferente a  la que tiene en la Selección. Por fortuna Walter (Ayoví) es un jugador polivalente, muy inteligente  y con mucha técnica,  tiene una muy buena respuesta en la cancha.  ¿Quién ocuparía  el  costado izquierdo?   Esperemos  hasta el inicio del Mundial; no  es  fácil,  es cuestión de tiempo y de trabajo, no nos   podemos adelantar a los hechos.    En Ecuador Jairo Campos y  en Colombia Radamel Falcao, ¿le  preocupan posibles lesiones? Sí, indudablemente, estamos todos expuestos. Hay que pedir la bendición de Dios para que estemos todos  con salud, sobre todo  los jugadores que están muy expuestos. Son situaciones de la profesión y siempre estos meses previos se vuelven muy vulnerables por la intensidad con que se juega en todas las ligas del mundo, por el estrés que manejan los  jugadores.  Pero cada uno deberá trabajar de la mejor forma y ser inteligente para cuidarse y evitar este tipo de situaciones.       Luis Saritama no ha tenido minutos en lo que va de la temporada, ahora ha llegado  a un arreglo para jugar en  Barcelona por un año, ¿beneficiará  esta decisión al jugador?   Sí, conozco que está muy motivado.  Él está muy contento, todos conocemos la integridad con que se maneja Luis Fernando, su profesionalismo  y  su  deseo de estar en la Selección y en el Mundial.    Barcelona  es un gran desafío en su carrera deportiva y  le deseo el mayor de los éxitos.    Solo Segundo Castillo y Antonio Valencia tienen experiencia mundialista entre quienes han estado en el proceso, en comparación a los seleccionables de Suiza, Honduras y Francia. ¿Cuánto puede pesar ese aspecto en el Mundial?   Habrá que contrarrestarlo con los demás argumentos que tiene el grupo, como son la buena calidad técnica, el compañerismo, la solidaridad, los deseos de triunfar; va a ser muy positivo eso para que podamos compensar esa falta de experiencia porque tenemos un grupo muy joven.   A pesar de  que Antonio Valencia acumula minutos, su equipo no está bien en la Premier League, ¿eso puede afectar su desempeño en la Selección? Seguramente que sí, aunque él está muy claro y comprometido con la Selección; pero seguro que si  continúa con esa racha negativa en  su club, le va a influir. Ojalá que en estas  semana con esos partidos tan difíciles lo supere,  porque tiene los argumentos, y por la calidad de la nómina todos pueden mejorar su rendimiento.    ¿Cómo vio el traspaso de Frickson Erazo al fútbol brasileño? ¿Qué se puede destacar de ese fichaje? Como a todos  le ha tocado semanas complicadas, es un proceso de adaptación que ojalá lo supere porque tiene calidad. Es un jugador inteligente, tiene carácter, no será fácil, esperamos que lo  supere y que podamos contar con él para el Mundial de Brasil.     ¿Existirá alguna sorpresa en la convocatoria de un tercer arquero, considerando la jerarquía de  Máximo Banguera y Alexánder Domínguez? Hay que esperar; son semanas cortas, son meses cortos, uno no sabe qué  va a pasar   hasta que no llegue la última convocatoria y estemos en Brasil.   ¿Qué se le puede decir a los ecuatorianos que están esperando una destacada participación de la Tricolor en Brasil 2014? Que sigan confiando en la Selección. De nuestra parte siempre la gratitud por la pasión  y el cariño que le tienen al equipo; que el grupo se va a entregar con mucha mística y carácter, con mucha integridad para hacer un buen torneo  y que Ecuador quede bien posicionado. ¿Por qué se demoró en anunciar la sede de Ecuador en Brasil (Viamao), cuáles son los beneficios de ese lugar?  Es una sede que se había adelantado previamente,  aunque existían   otras alternativas, pero  todo se basó en el sorteo de diciembre. Lo ideal era hacer sede en una de las ciudades donde vamos a competir, para ahorrarnos  viaje. Ahora vamos a tener que viajar  tres veces  porque en Porto  Alegre  no  tenemos    partidos.  Se  buscó  otras      alternativas como    Brasilia  o Río de Janeiro, pero  nos  inclinamos por Viamao, que está ubicada  más cerca de Curitiba,  a 40 minutos en avión. No es lo ideal, pero ofrece  garantías  la sede en cuestión por la  privacidad -si no se altera lo que se tiene proyectado-. Además la movilidad que se   garantiza es muy importante porque no tendremos que pasar por un aeropuerto sino por una base militar. Es un lugar muy bonito,  con muchos espacios, con un hotel nuevo, dos canchas y la posibilidad de evitar el gasto de ir a un estadio a entrenar. Vamos a estar muy cómodos.