Es una frase que fue usada por un jefe de la policía de Miami en 1967 para referirse a la “dureza” con la cual combatiría el crimen causado por los jóvenes delincuentes juveniles, especialmente afroamericanos. Pero realmente fue acuñada por autoridades y líderes norteamericanos segregacionistas en medio de las manifestaciones de los activistas de raza negra que hacían demostraciones por los derechos civiles, dirigidos por Martin Luther King.

No hay duda que es una frase con un contenido e historia profundamente racista, que ha perdurado por más de cuatrocientos años en los Estados Unidos y que no ha podido ser erradicada de la cultura americana.

Y usando su inseparable Twitter, el presidente Trump la usó para referirse a las manifestaciones que se iniciaron en Minneapolis a raíz del asesinato (no creo que se pueda llamar de otra manera) del ciudadano afroamericano George Floyd en manos de la policía. Uno de sus mensajes decía: “Yo no puedo estar impasible mirando lo que está sucediendo en esta gran ciudad americana de Minneapolis. Una total falta de liderazgo.

O el muy débil alcalde radical Jacob Frey, se focaliza y pone la ciudad bajo control o yo enviaré a la Guardia Nacional para que pongan las cosas en orden…” Y a este mensaje, le seguían una serie de mensajes amenazantes: “…Estos maleantes están deshonrando la memoria de George Floyd y no permitiré que esto suceda. Acabo de hablar con el gobernador (de Minnesota) Tim Waltz y le informé que el ejército lo apoyará todo el tiempo. Cualquier dificultad y asumiremos el control, pues, cuando el saqueo empieza, se inicia el tiroteo. Gracias.”

Estos muy inapropiados, impertinentes y peligrosos mensajes hicieron que Twitter tome una decisión sin precedentes de limitar el acceso del público pues claramente Trump amenazaba disparar a los manifestantes, con lo cual violaba las Reglas de Twitter acerca de glorificar la violencia. Pero el daño ya estaba hecho. Las manifestaciones y disturbios violentos se han esparcido por todo el territorio americano.

Que sirva esto de lección a nuestras autoridades pues “siembra vientos y cosecharás tempestades” y aquí también nuestro Ministro de Defensa expidió un protocolo de uso de la fuerza y armas letales en caso de violentas manifestaciones. Estamos viviendo una época en la cual la gente está muy insatisfecha, lo que le hace proclive a fácilmente violar las leyes. (O)