Cómo funciona el sistema capitalista actual: El banco semiprivado Sistema de la Reserva Federal, FED, imprime dólares que presta a interés a los EE.UU., que le paga con bonos; la FED los comercia a manera de tributo en la banca mundial. Cada año se da el show sobre el incremento del techo de este endeudamiento, que ya supera la exorbitante cifra de 17 billones. Cuando todo parece perdido, se firma el acuerdo salvador, que hace persignar al asustadizo y da oxígeno al imperio.
Muchos se preguntarán: ¿Cuál es el problema? Pues a nosotros ni nos va ni nos viene mientras con ese dinero compren nuestros productos, porque eso nos da de comer y mueve la economía mundial.
Sí, así mismo es, pero también por ese dinero la llamada prensa libre canta ditirambos a favor de los intereses del imperialismo y los gobernantes de algunos países se venden y se convierten en administradores de esos intereses. Ese dinero permite que la seguridad mundial funcione para ellos; con ese dinero contratan al especialista que no halla trabajo en su terruño y que necesitan para que les funcione el sistema; con ese dinero financian sus guerras e invasiones, mantienen mil bases en cien países y sustentan dictaduras opresoras de sus propios pueblos, que les entregan todo a cambio de nada; con ese dinero ponen obstáculos a la Segunda Independencia de Latinoamérica; con ese dinero asesinaron a Sandino, a Allende, al Che y a todo líder popular que les estorbe; con ese dinero financiaron a Posada Carriles, quien puso bombas en aviones civiles, luego lo declararon perseguido político y le dieron albergue; con ese dinero corrompen al que pueden, y cuando sus sátrapas buscan refugio bajo su regazo porque los pillaron con las manos en la masa, desde allí hacen nariguetas a todo el que reclame su extradición; con ese dinero financiaron la destrucción del Campo Socialista. Según Quevedo: Poderoso caballero es don Dinero.
¿Qué hacer, entonces? Se preguntarán algunos luego de comprobar la veracidad de este escrito y dirán: No hay salida al laberinto, ya que la bestia es tan poderosa, no queda más que dejarla actuar; así, a lo mejor, logramos sobrevivir de las migajas que nos arroje. Pues sí qué la hay: Unámonos desde el Río Grande hasta la Patagonia, pues la unidad crea fuerza, puesto que el dominio de la bestia es universal, la oposición debe ser a nivel planetario. Unidos somos más y la bestia, que por oprimir a su propio pueblo tiene los pies de barro, se derrumbará sola. Su talón de Aquiles es la excesiva cantidad de dólares emitidos.
