El tenista sueco Bjorn Borg marcó una época en el tenis mundial. Se puede decir que el tenis se jugaba de una manera antes de Borg y que con la aparición de este joven escandinavo en el circuito profesional, con apenas 15 años de edad, cambió definitivamente.
Bjorn Rune Borg nació el 6 de junio de 1956 en Sodertalje. Desde pequeño mostró excelentes condiciones para la práctica del hockey sobre hielo, deporte muy popular en Suecia, pero a medida que iba creciendo, aumentaba su pasión por el tenis. A los 11 años, guiado por su entrenador Percy Rosberg, decidió dedicarse de lleno al deporte blanco.
Bjorn siempre mostró una precocidad y madurez fuera de lo común. A los 13 años ya ganaba torneos en la categoría de hasta 18 años, derrotando a los mejores jugadores juveniles de su país.
Tenía golpes poco ortodoxos para la época. A comienzos de la década del 70 predominaba la empuñadura continental, que permitía golpear la pelota plano o cortado (slice) y el revés se jugaba con una sola mano. Los norteamericanos y australianos jugaban servicio y volea o buscaban la primera oportunidad para subir a definir cerca de la red, pero este joven, callado y con una larga melena rubia, golpeaba la pelota con mucho efecto de top spin, tanto de derecha, como de revés y no solamente eso, sino que jugaba el revés con 2 manos. Casi nunca subía a la red, sino que aprovechaba su gran velocidad de piernas para alcanzar pelotas prácticamente imposibles y jugar passing shots ganadores que frustraban a sus oponentes.
Sus críticos decían que con ese estilo de juego, sin subir a la red y con una empuñadura extrema (western) en su derecha, sus mejores resultados serían sobre canchas de arcilla, pero que no tenía la menor opción de ganar sobre el césped de Wimbledon.
Lennart Bergelin, gran jugador de Copa Davis sueco -ya retirado para entonces- desempeñaba el cargo de capitán del equipo de Copa Davis de Suecia y fue quien hizo debutar a Borg a los 15 años de edad en una serie contra Nueva Zelanda. Bjorn no lo decepcionó, superó una desventaja de 2 sets a 0 y venció al experimentado Onny Parun 6-4 en el quinto set. Además jugó dobles junto a Ove Bengtson, perdiendo frente a Parun y Jeff Simpson y derrotó a Simpson en 4 sets para sellar la victoria de su equipo por 4-1.
Bergelin se convirtió en el entrenador personal de Borg y esa relación se mantuvo durante toda su carrera profesional. Fue una especie de padre para él, además se encargaba de todos los detalles necesarios para la preparación de su pupilo. Incluso él mismo se encargaba de encordar las raquetas que Borg usaba a tensiones altísimas, por encima de las 80 libras de presión. Hay que tener en cuenta que se trataba de raquetas de madera, con un área de impacto muy pequeña si la comparamos con las raquetas actuales, es decir la sensación era casi como la de pegarle a la pelota con una tabla.
Suecia ganó la Copa Davis por primera vez en 1975, derrotando a Checoeslovaquia en la final, con Borg como líder indiscutido de un equipo que no tenía otras figuras de su talla, por lo tanto dependían de los 2 partidos individuales de Bjorn y muchas veces del partido de dobles que jugaba él mismo junto a Ove Bengtson.
Borg terminó su carrera con un récord que resiste al tiempo: 33 partidos de singles consecutivos sin conocer la derrota, su historial final es de 37 ganados y 3 perdidos en singles.
También era conocido como ‘el hombre de hielo’, por su frialdad bajo presión, nunca demostraba ninguna emoción mientras jugaba, ni positiva ni negativa, lo cual resultaba frustrante para sus rivales.
En 1974 gana el primero de sus 6 títulos en Roland Garros, venciendo al español Manuel Orantes, tras ir perdiendo por 2 sets a 0, acababa de cumplir 18 años durante el torneo, convirtiéndose en el ganador más joven de la historia hasta ese momento.
En 1975 defiende su título ganándole en la final a Guillermo Vilas, uno de sus mejores amigos en el circuito.
En 1976 Borg no logra defender su corona en Francia, pero contra todo pronóstico se corona campeón de Wimbledon sin perder un solo set, ganándole en la final al talentoso y temperamental rumano Ilie Nastase, que por su experiencia y su tipo de juego era el favorito sobre esta superficie. Pero lo que hace más sorprendente su triunfo es que todo el tiempo jugó desde el fondo de la cancha y con 20 años 1 mes, era el campeón más joven de la historia, -récord que fue roto por Boris Becker en 1985-, pierde la final del US Open frente a Connors sobre la arcilla verde norteamericana conocida como Har- Tru. En 1977 no participa en Roland Garros, pero gana otra vez en Wimbledon, venciendo en la final a su acérrimo rival Jimmy Connors y mostrando gran mejoría en su servicio y en su juego de red, volviéndose un jugador cada vez más completo. Al año siguiente gana su tercer Roland Garros, superando por segunda vez al argentino Vilas en la final, llega a su segunda final en el Abierto de Estados Unidos, pero pierde frente a Connors en las nuevas canchas de cemento de Flushing Meadows. El paraguayo Victor Pecci alcanza la final de Roland Garros 1979, pero cede ante el sueco en 4 sets, quien unas semanas más tarde se coronó campeón de Wimbledon por cuarta oportunidad, derrotando una vez más a Connors en la final y posteriormente alcanza el primer lugar del ranking mundial por primera vez.
1980 lo ve nuevamente en lo más alto en París y Londres. En Francia vence a su mejor amigo, el estadounidense Vitas Gerulaitis en la final, y en Wimbledon, en un partido histórico, vence a John McEnroe 8-6 en el quinto set. Este encuentro es considerado uno de los mejores partidos de tenis de todos los tiempos. Pero el US Open le deparó una nueva frustración, perdió su tercera final en otro gran partido con McEnroe, 6-4 en el quinto y decisivo set; sin embargo, termina el año una vez más como el # 1 del mundo.
En 1981, que a la postre sería su última temporada, vence al joven Ivan Lendl para sumar su sexto campeonato en Roland Garros, pierde la final de Wimbledon frente a McEnroe en 4 apretados sets, el US Open iba a definir el # 1, de ese año y John McEnroe fue el ganador en 4 sets.
