Para los católicos, los días de Semana Santa son de reflexión y de intentos -humanos intentos- por mejorar la vida espiritual. El Obispo de Roma es un referente para estos ejercicios que suelen hacer millones de seres humanos por estas fechas, en todo el planeta.
El papa Francisco, desde el día de su elección, 13 de marzo de 2013, ha dado muestras de poseer dos cualidades: humildad y valentía.
En efecto, el 22 de marzo de 2014, el Pontífice argentino recibió a los miembros de las asociaciones de radio y estaciones de televisión de inspiración católica, que habían viajado a Italia para visitarlo. En la mencionada fecha, dijo a los asistentes: “Los peores pecados de los medios de comunicación son la calumnia, la difamación; pero sobre todo, la desinformación”. En su discurso también denunció cómo a veces los medios tratan ciertos temas “sin el debido respeto por las personas y los valores”.
Sobre los principales y más graves pecados de los medios de comunicación, el Papa explicó que “la calumnia es pecado mortal, pero se puede llegar a conocer la verdad”, al igual que con la difamación, se puede finalmente decir que fue “una injusticia” y “pedir perdón por ello”.
El Papa argentino aseguró que el peor de todos los pecados es la desinformación, “el decir las cosas a medias”, lo que no permite a quien ve la televisión o escucha la radio “hacerse un juicio de valor porque no tiene elementos, nadie se los ha dado”.
Hace pocos días, el 11 de abril de 2014, pidió perdón a los niños que habían sido víctimas de abusos sexuales por parte de algunos sacerdotes.Jorge Bergoglio instó a las radios y a las estaciones de televisión a “transmitir a través del éter la voz que hable a los hombres y a las mujeres que busquen una palabra de esperanza para su vida”. Realizó un llamamiento para que se preste atención “a temáticas importantes para la vida de las personas, de la familia, de la sociedad, sin un trato sensacionalista, pero sí responsable, con sincera pasión por el bien común y la verdad”.
Para el Pontífice, en los medios de comunicación “actualmente hay mucha contaminación. La gente lo sabe; pero, por desgracia, se ha acostumbrado a respirar de la radio y la televisión un aire sucio, que hace daño”. Finalmente, invitó a los medios a que “hagan circular aire limpio, que la gente pueda respirar libremente y que dé oxígeno a la mente y al alma”.
Hace pocos días, el 11 de abril de 2014, pidió perdón a los niños que habían sido víctimas de abusos sexuales por parte de algunos sacerdotes.
A través de la Radio Vaticana puntualizó: “Me siento obligado a hacerme cargo de todo el mal que algunos sacerdotes han hecho por los abusos sexuales con los niños. La Iglesia es consciente de este daño. Es un daño personal, moral, hecho por hombres de la Iglesia. Y no vamos a dar un paso atrás en lo que se refiere al tratamiento de este problema y a las sanciones que se deben imponer. Creo que debemos ser muy fuertes.
Con los chicos no se juega”. Palabras del humilde y valiente Papa suramericano, que en Argentina era conocido como el ‘Obispo de los Pobres’.